"Galdós es inmortal. Vivía antes que nosotros y seguirá viviendo, a través de su obra, cuando nosotros nos hayamos marchado", aseguró ayer Yolanda Arencibia, directora de la cátedra Pérez Galdós de la casa museo de la calle Cano. Porque las palabras que escribió el autor de Las Palmas de Gran Canaria contienen una parte de su alma y, de algún modo, Galdós revive cada vez que alguien lee su obra.
Con esta filosofía, el espacio museístico, ubicado en la casa que vio nacer al más universal de los literatos canarios, celebró ayer el 173 aniversario de su nacimiento, el 10 de mayo de 1843, con una lectura de Memorias para un desmemoriado en el que intervinieron cerca de 180 personas. En este encuentro participaron cargos públicos como el director general de Cultura del Cabildo de Gran Canaria, Oswaldo Guerra; el rector de la ULPGC, José Regidor; los responsables de los principales museos de la Isla; escritores; y amantes del verbo de Galdós. Pero, se impuso la oratoria lozana de más de 70 alumnos entre Primero de la ESO y Primero de Bachillerato de tres centros escolares: Colegio Sagrado Corazón de Tafira, San José Dominicas y San Pablo CEU.
"La mejor manera de homenajear al autor es leyendo su obra", explicó Yolanda Arencibia, además de destacar el valor que implica el sembrar la semilla galdosiana en los jóvenes estudiantes y las generaciones del mañana. "Los autores están vivos a través de la lectura y los clásicos nos hablan como si fueran nuestros contemporáneos. Por eso es tan importante la labor educativa", expuso Victoria Galván, directora de la casa museo.
Aldo Redondo Marrero y Ana Segui Hernando, de 13 años y alumnos del Sagrado Corazón, fueron dos de los escolares en participar en esta actividad. Sus profesoras Cecilia Quevedo y Delia Rosa Luján aprobaron con nota su dicción y vocalización. Mientras, los estudiantes aseguraron que es importante conocer a Galdós, aunque por el momento Aldo seguirá con el deporte y Ana con las aventuras de Ana de las tejas verdes. "También me gusta Galdós, pero probablemente lo dejaremos para cuando seamos más mayores", apuntaron ambos al tiempo.
El museo homónimo seleccionó Memoria de un desmemoriado, que no se había leído en ninguna de las ocho ediciones anteriores, por coincidir con el centenario de la publicación de la primera edición de esta serie de artículos que recogen los recuerdos biográficos del escritor canario. Galdós ya anciano y completamente ciego resume en este título algunas etapas de su vida y, en especial, sus viajes. En estas memorias, Pérez Galdós omite sus años de infancia en Gran Canaria, según aseguró, por "carecer de interés o se diferencia poco de otras de chiquillos o de bachilleres aplicaditos".
Victoria Galván explica que el autor eligió el título precisamente por el hecho de omitir muchos datos biográficos de su vida, "hasta el punto de que no podemos decir que sea el mejor texto para conocerlo, ya que resalta momentos puntuales de su trayectoria, sobre todo cuando llega a Madrid".
La directora del museo que alberga las pertenencias personales del autor, así como un amplio fondo documental y bibliográfico, señaló, con motivo del aniversario, que si bien Galdós es un autor canónico y reconocido internacionalmente, "no podemos estar satisfechos con la recepción o el conocimiento real que se tiene del autor". Por este motivo, recordó que es necesario seguir promocionando esta figura en su tierra natal y "haciendo ver a las nuevas generaciones que los escritores del pasado pueden ser una gran lección a parte de entretenimiento".
Las Palmas
La trayectoria del intelectual, considerado como principal exponente de la novela realista española del siglo XIX, está ligada a la ciudad de Madrid, en la que se instaló en 1862. "No en vano, es el autor que mejor ha recreado y evocado la capital española en su tiempo", apuntó Victoria Galván. Por su parte, Plácido y Pablo Checa, autores del título La ciudad de Galdós y participantes en la lectura, sostienen que incluso hoy existe mucha gente en España que considera a Galdós un escritor madrileño.
"Este aniversario sirve para reivindicar la figura del autor y su relación con Las Palmas, que era el nombre de la ciudad cuando nación Galdós. Nosotros, con este proyecto, intentamos unir el nombre del escritor más importante en lengua hispana después de Cervantes y la capital grancanaria, donde se crió hasta los 18 años", expuso antes de sentenciar que: "él siempre consideró a Las Palmas como su ciudad".
Por último, en año especialmente significativo en el universo de las letras, con el cuarto centenario de la muerte de Cervantes y Shakespeare, desde la casa museo Pérez Galdós se sitúa al autor canario en el mismo nivel creativo y literario. A este respecto, la figura de Shakespeare tuvo anoche protagonismo con la conferencia El universo de Shakesperare, impartida por Christian Santana, quien abordó la vigencia de su obra así como el conocimiento de las pasiones y de la condición humana.
