La Asociación Islas Canarias de Artistas Visuales (Aicav), concedió ayer el premio Lola Massieu a la gestora cultural Hilda Mauricio, jubilada el pasado mes de diciembre, por una labor de décadas vinculada al arte desde distintos desempeños. La entrega tuvo lugar ayer en el Salón Oriente del Gabinete Litarario.

El escultor Leopoldo Emperador, que forma parte de la directiva de Aicav, explicó que "desde los años sesenta, Hilda Mauricio ha estado apoyando a los artistas y se involucró mucho más allá de lo que marcaba su horario de trabajo".

Emperador explica que Mauricio "se involucró en tantas cosas, al punto de que creó muchas amistades con los artistas. Por eso, estamos en deuda con sus esfuerzos. No hay que olvidar que fue una de las impulsoras del tema del CAAM, una de las responsables de su nacimiento".

Hilda Mauricio asumió diferentes responsabilidades durante su larga etapa como gestora. Fue conservadora de la Casa de Colón, una época en la que además impulsó los Talleres de Arte Actual, que acercaron a la Isla a artistas cono Nacho Criado, Juan Genovés, Jordi Teixidor y Josep Guinovart, entre otros.

Fue impulsora del CAAM, del que llegó a ser subdirectora en la etapa de Martín Chirino. El centro de arte contemporáneo le debe a su tesón el impulso inicial.

También fue directora general de Cultura del Gobierno canario y responsable de la sala de Arte Contemporáneo del Cabildo grancanario, hasta su reciente jubilación. Su labor coincide con un cambio sustancial en el ecosistema del arte en la Isla, en el que antes lo contemporáneo tenía una visibilidad mucho menor",

El premio Lola Massieu lleva el nombre de una importante creadora que fue fundadora de la asociación de artistas Aicav, a la que se pretende honrar. Es, como explicaba ayer el escultor Leopoldo Emperador, "un pequeño homenaje a Massieu".