El compositor lanzaroteño y coordinador del 33º Festival de Música de Canarias, Nino Díaz, pidio ayer disculpas a los abonados del certamen, a los responsables de dirección que ha tenido el proyecto y a sus patronos, ante el "enconado debate" generado tras el anuncio de la programación de la próxima edición, que se celebra entre el 7 de enero y el 5 de febrero de 2017.
En un comunicado difundido ayer por la Consejería de Turismo, Cultura y Deportes, que dirige María Teresa Lorenzo, Nino Díaz señala que "un proyecto de esta trascendencia puede y debe ser objeto de reflexión pero no ser utilizado como un elemento para la confrontación. Mi posición, aunque transitoria, me obligaba a mantener una exquisita neutralidad que debo reconocer que no he gestionado con la debida atención. Creo que es imprescindible sosegar este debate abierto y debo empezar dando ejemplo para reconducirlo de manera productiva".
Las manifestaciones de Nino Díaz se producen después que se lanzara una campaña de recogida de firmas en la plataforma change.org, impulsada por el músico y compositor Enrique Mateu, en la que se insta al presidente del Gobierno canario, Fernando Clavijo, a que apoye el nuevo modelo de Festival de Música diseñado por Díaz. Una petición suscrita por el propio coordinador del Festival y por el diputado de Podemos, Juan Márquez, entre otros, en respuesta a las críticas que ha recibido la propuesta de "nueva línea programatica" del evento.
Protagonistas
Pese a mantener un presupuesto inicial de 1,3 millones de euros -más el retorno por abonos y entradas- y abrir al repertorio a Latinoamérica y la música contemporánea, se ha prescindido de la contratación de orquestas sinfónicas internacionales en favor de la Mahler Chamber Orchestra y la Mozarteum de Salzburgo, protagonistas de los conciertos de apertura y clausura, además de las dos formaciones insulares, la Filarmónica de Gran Canaria y la Sinfónica de Tenerife, que celebran un concierto conjunto junto al Coro de la OFGC, el Coro de la Ópera de Tenerife y el Coro Eslovaco, dirigidos por Josep Pons. Con una representación de 600 músicos y 91 conciertos previstos, el cartel del 33º Festival se completa con el Cuarteto de Cuerda La Habana, que estará en gira por todas las Islas; el homenaje a Granados que con el título de Amor y Muerte. Goyescas cuenta con el concurso de la pianista Rosa Torres-Pardo, la soprano Isabel Rey, el tenor Manuel Gómez Ruiz y el videoartista Hugo Alonso Ruiz; y la formación venezolana Patchwork Ensemble que dirige Pedro Barboza, que además de estrenar nuevos espacios como El Tanque en Santa Cruz de Tenerife y el Castillo de Mata en la capital grancanaria, llegará a los escenarios de Lanzarote, Fuerteventura y La Palma.
Junto a éstos, las pianistas Katia y Marielle Labèque, Accademia del Piacere, Ensamble Villa de la Orotava, Dúo Antwerp, Arts Duo, Quantum Ensemble, Academy of Ancient Music, las bandas municipales de las dos capitales, y un homenaje al artista Juan Hidalgo que le brinda la Sinfónica de Tenerife bajo la batuta de Arturo Tamayo.
Según manifiesta Nino Díaz en el citado comunicado con el que pretende finiquitar la polémica y las críticas y apoyos surgidos de diferentes ámbitos, "lo importante del Festival es su función como herramienta cultural y su rentabilidad social. El balance en ese plano, tras 32 años de celebración ininterrumpida, es positivo y no sería justo que no lo destaquemos y con ello la aportación de muchos profesionales, artistas y público que lo han hecho posible, así como al compromiso del Gobierno de Canarias que lo ha respaldado en cada legislatura. Negar esto es ignorar el esfuerzo y la visión de las personas e instituciones que han sostenido su prestigio durante más de tres décadas. La historia del Festival de Música es una historia de éxito, eso no he pretendido ponerlo en duda y es nuestra obligación que lo siga siendo con la participación de todos sin exclusión".
En su opinión de Díaz," todos estamos en la obligación de elevar el debate sobre la política cultural en Canarias. Es una exigencia irrenunciable, más exigible aún para quienes como yo tenemos el privilegio de ostentar responsabilidades en el ámbito público. Esta fase transitoria recomendaba sosiego, reflexión y acuerdo".
En este sentido, el coordinador del 33º Festival admite que "debo disculparme públicamente por no haber contribuido decididamente a este objetivo e igualmente, por algunas manifestaciones y acciones desafortunadas que no pretendieron ofender ni a los abonados que traducen su pasión por este proyecto con su fidelidad, a quienes me antecedieron en esta responsabilidad, a quienes mantienen cualquier opinión, sea cual sea, en un proceso en el que todas deben ser respetadas y valoradas y por supuesto, a quienes depositaron su confianza en mí para desarrollar esta tarea". En este sentido, Nino Díaz expresa su confianza en "serenar este debate y alejarlo de cualquier intención que no contribuya a su fortalecimiento".
Cabe recordar que Nino Díaz asumió la coordinación del 33º Festival de Música tras la decisión del consejo de administración de Canarias Cultura en Red, en una reunión celebrada el 20 de abril de este año, de cesar a Candelaria Rodríguez en la dirección del Festival, cargo que ostentaba desde 2009. A Díaz se le nombró coordinador de la llamada "comisión de trancisión" junto al musicólogo y Diputado del Común, Jerónimo Saavedra, la catedrática de Historia de la Música de la Universidad de La Laguna, Rosario Álvarez, y cinco técnicos de Canarias Cultura en Red. La plaza de dirección se sacará a concurso público, y estas tres personas quedan excluídas de la convocatoria cuando esta se produzca.
El propio Nino Díaz se manifestaba en este sentido y dejaba claro en el comunicado que no tiene aspiraciones a dirigir el Festival. "El posterior devenir del Festival de Música no es patrimonio de nadie. Desde luego, mío tampoco. Al contrario, debe ser objeto de una serena reflexión colectiva, siempre bajo los criterios de la excelencia intelectual y el mejor destino para los recursos públicos, que siempre serán escasos. Esto pasa también por reconocer el legado del Festival a lo largo de estos 32 años, ya que es un excelente punto de partida a la hora de plantear nuevos objetivos".
A su juicio, "un gran Festival de Música no se construye a partir de etiquetas, un error que debemos corregir y centrarnos en un debate de altura en el que quepan todos que me comprometo a impulsar y en el que me situaré en el discreto lugar que me corresponde".
