Ponga a un grancanario en el extranjero, haga que se relacione con un nativo de ese lugar y, en un porcentaje elevado, en esa conversación saldrá el nombre de José Vélez. Es casi como una ciencia exacta. Da igual el punto cardinal del mundo en el que se dé esa circunstancia. Vale para Japón, Estados Unidos -allí también son legión los fans de Braulio- o Argentina.

Y con ese salvoconducto en el bolsillo, el artista teldense ha vuelto a cruzar el charco para girar por Colombia y Argentina -en el primer tramo de su tour-, triunfar en ciudades como Cali, Pasto o Medellín antes de saltar hasta el Cono Sur del continente y ejercer como patrón de la canción ligera en Sudamerica.

El Teatro Jorge Isaacs (Cali, Colombia), el pasado 29 de julio, fue la primera parada de la gira 'Un año más, Sur América'. Allí, en la 'Sultana del Valle', el cantante teldense presentó los temas de su última trabajo -José Vélez siempre- y repasó clásicos de su carrera como Vino griego, Romántica, El canarito -tema que le sirve de sobrenombre en el continente americano- o Bailemos un vals-.

Tras llenar el auditorio de Cali, Vélez dio el salto hasta Medellín para ofrecer un recital en el Centro de Eventos de la capital del departamento de Antioquia y cerró su paso por Colombia en el Teatro Bethlemitas de Pasto, donde actuó para celebrar el sexto la emisora de radio 88.1 FM, Románticos.

Siguiente parada

Tras Colombia, Vélez regresará a Argentina, un país donde sus seguidores se cuentan por miles. Allí, a principio de los años 80, vendió algo más de tres millones de ejemplares de su disco Confidencias. El vocalista de La Garita ofrecerá varios conciertos en diferentes ciudades antes de regresar a España para tomar un descanso y reanudar su gira sudamericana a partir del mes de septiembre.

Para cerrar 2016, Vélez tiene reservadas dos fechas en el Auditorio Alfredo Kraus, donde cantará los días 17 y 18 de diciembre. Las entradas de ambos recitales ya se encuentran a la venta en las páginas web del propio auditorio y del Teatro Pérez Galdós. Será el broche de otro año más en la carrera de un artista que ha brillado bajo los focos del Madison Square Garden de Nueva York o el Teatro Gran Rex de Buenos Aires.