El músico belga Toots Thielemans, considerado una leyenda del jazz por su prodigiosa destreza con la armónica, falleció hoy a los 94 años en un hospital, informó su representante, Veerle Van de Poel. El artista estaba ingresado desde el mes pasado por haber empeorado su salud y ha muerto "mientras dormía", indicó el diario belga Le Soir en su edición digital. "No hubo complicaciones. Murió por la edad, su cuerpo estaba agotado", señaló Van de Poel.

Thielemans, que residía en la ciudad valona de La Hulpe, a unos veinte kilómetros de Bruselas, colaboró con los nombres más importantes del jazz, como Bill Evans, Ella Fitzgerald, Quincy Jones y Pat Metheny, y también del pop, como Billy Joel, Paul Simon y Natalie Cole.

La edad no le impidió sin embargo subirse a los escenarios. Cuando cumplió 90 años el artista quiso celebrar junto a los amantes de su música la vida con una gira de ocho conciertos en Bélgica. Nacido el 29 de abril de 1922 en el barrio de Les Marolles, uno de los que tiene más encanto de Bruselas por sus tiendas de antigüedades, al músico se le atribuye haber conseguido que la armónica tenga un lugar destacado entre los instrumentos del jazz.

El artista, conocido también por el apodo Toots (del saxofonista Toots Mondello y del compositor Toots Camarata), empezó a tocar un viejo acordeón cuando tenía tres años en el café regentado por sus padres.

Thielemans descubrió la armónica en 1938. Con 16 años se sumergió en el universo de los filmes del jazzista Ray Ventura. "El virus del jazz le picó durante la guerra", relata el diario Le Soir. Tocó la guitarra en los clubes de música y tomó a su compatriota Django Reinhardt y su estilo -revolucionó el toque de guitarra en el jazz- como ejemplo.

Tras iniciarse en la música junto a Bobby Jaspar, Rene Thomas y otros belgas y holandeses, se estableció en 1952 en Estados Unidos, donde tocó con el saxofonista Charlie Parker. Fue con el clarinetista neoyorquino Benny Goodman con quien hizo su primera gira internacional por Europa. En 1962 compuso Bluesette, pieza que le dio fama; en 2011, el rey Alberto IIle concedió el título de barón y en 2009 recibió la mayor distinción del jazz estadounidense, el jazz master award.