Visitar un museo puede ser una opción de lo más divertida si se utilizan las estrategias adecuadas para que los jóvenes acudan voluntariamente a él. Así lo demostró ayer el Centro de Arte La Regenta con la celebración de la 23ª edición de los Premios de Pintura DEAC que contó con la asistencia de más de cuatrocientos estudiantes de institutos y colegios de Gran Canaria.

Era también la inauguración de una exposición, integrada por las 45 pinturas realizadas por los jóvenes que participaron en sus Talleres de Arte el pasado curso escolar, que estará abierta al público hasta el 28 de este mes de enero en la primera y segunda planta del centro, y que ha sido organizada por el Departamento de Educación y Acción Cultural del espacio de producción artística. Todos los murales que participan en el premio son el resultado de la inspiración de los participantes, en total unos 2.750 estudiantes, que tras el recorrido didáctico por cada una de las exposiciones, pasan a los talleres de arte y realizan una obra en común, que después de la muestra se les enviará a sus respectivos centros.

Al acto de ayer acudieron la directora general de Promoción Cultural del Gobierno de Canarias, Aurora Moreno; el director de La Regenta, Alejandro Vitaubet y la artista invitada, Abigail Ojeda, que dieron a conocer el fallo de los Premios de Pintura DEAC 2017. También estuvieron presentes las responsables del departamento de Educación y Acción Cultural de La Regenta, Natalia Ferrando, y Marta Vega que, junto a los dos anteriores, completaban el jurado. De este modo, los alumnos de Primero D de la ESO del Instituto Islas Canarias ganaron el primer premio consistente en 500 euros en material escolar con una obra que fue realizada tras la visita de la exposición Ósmosis, de Julio Blancas y Carlos Nicanor. El primer y segundo accésit, consistente en 250 euros también en material escolar, recayeron, sin embargo, en Primero B y C de Bachillerato del Instituto Tomás Morales y Primero C de la ESO del Instituto Heidelberg, respectivamente, con obras realizadas tras visitar la exposición Zonians de Matías Costa. Aurora Moreno recordó, durante su intervención, que la de ayer era el culmen de una acción que se lleva desarrollando a lo largo de todo el curso escolar. "Hace 23 años que La Regenta la desarrolla con el objetivo social y educativo de abrir el centro y las artes plásticas a la comunidad educativa, a los más jóvenes, y de ir descubriendo esas inquietudes", aseguró Moreno. Pos su parte, Alejandro Vitaubet recomendó a los estudiantes que sigan haciendo estas actividades ya que eran "unos privilegiados" por exponer en La Regenta, pero añadió que si están aquí es porque lo han logrado por su esfuerzo. El director anunció que para el año próximo tiene previsto preparar una edición más ambiciosa y comprometida en donde los participantes contarán con su propio espacio expositivo donde mostrar varias obras.

Emilio Ríos, profesor de plástica del Instituto Islas Canarias, el centro ganador del premio de este año, habló en nombre de los estudiantes. Los jóvenes se llevaron el primer premio con una obra que en la que se muestra una imagen en espiral dentro de una geometría triangular y que tiene muchas interpretaciones, realizado como un trabajo colectivo en donde intervienen 15 alumnos. "Se trata de un cuadro minimalista, abstracto geométrico, inspirado en la corriente del zentangle, y que son dibujos intricados, casi automáticos, que van a favorecer el fluir de la tranquilidad del creador", aclaró Ríos.

El profesor reconoció que la obra también desprende un carácter expresionista producto "de la técnica con chorreado, salpicado, etc., pero luego hay un trabajo de mascarado" y cuya idea surgió de una forma muy sutil ya que "estábamos trabajando en este tipo de trabajo en la línea Zentangle".

Para el profesor del Instituto Islas Canarias, la obra está inspirada no solo en la exposición de La Regenta, sino en la tarea diaria de los alumnos en sus clases. "Lo que tienen en su cabeza cuando estudian se pone en el lienzo", afirmó. Estos alumnos también crearon otra obra, un díptico negro y blanco muy minimalista y muy expresivo.

Coreografías

Uno de los momentos más esperados tuvo lugar cuando doce jóvenes de cuarto curso del instituto El Batán participaron en una coreografía de baile muy trabajado y divertida, realizada bajo los ritmos del contagioso tema Don't worry que ha arrasado en medio mundo y que convirtió al espacio principal del centro por unos momentos en una improvisada y vigorosa pista de baile. Una de las jovencísimas bailarinas, Laura Monzón, reconocía que habían estado ensayando todos los días durante una semana. En cuanto a los murales los estilos iban del impresionismo al minimalismo, con escenas cotidianas bastante curiosas realizadas por estudiantes de los institutos de enseñanza media de Schamann, Arguineguín, Jinamar, El Batán, Tony Gallardo Nueva Isleta, Islas Canarias, El Calero de Telde, Francisco Hernández Monzón, Domingo Rivero de Arucas, El Tablero de San Bartolomé de Tirajana, Poeta Tomás Morales Castellano, El Rincón, Santiago Santana de Arucas, José Zerpa de Vecindario, además de los colegios Hispano Inglés y Heidelberg, el centro de Educación Infantil y Primaria Aragón, y el Centro de Día Casa del Marino.

Corazeín Marrero y Andrea Rodríguez, ambas de 15 años, y del Instituto de El Batán, pintaron un sol amarillo y naranja cercano más bien a una supernova. "Lo hicimos en dos grupos de 20" comentó. "Unos utilizaron el lápiz, otros los colores, e íbamos improvisando", añadieron. "La idea partió de los círculos para darle color y lo impregnamos de un toque diferente".

A través del Premio de Pintura DEAC, instaurado en 1994, el Centro La Regenta trata de acercar y enseñar el arte a los más jóvenes, despertando en ellos el amor hacia la pintura y, a su vez, propiciando descubrir posibles inquietudes artísticas. "Es una atención individualizada", señala Natalia Ferrando. "Las visitas guiadas duran 45 minutos, entran a las 11.00 y a las 12.00 horas ya han hecho el mural basado en la exposición", añadió. En sus veintitrés ediciones, el Premio ha contado con artistas de reconocido prestigio como parte del jurado que valora las obras. Este año, por primera vez, sin embargo, no han contado con un patrocinio privado. "Es una pena", afirma. "Porque la aportación de las empresas privadas es fundamental, y ellas siempre sacan un beneficio".