El cantante y compositor uruguayo Daniel Viglietti falleció el pasado lunes en Montevideo a los 78 años por complicaciones en una intervención quirúrgica. El compositor, cantante y guitarrista nació en Montevideo en 1939 y es considerado uno de los mayores exponentes del canto popular uruguayo y un referente para varios cantautores de América Latina.

El cantante frecuentó en varias ocasiones los escenarios de Gran Canaria desde los años 80. Su última visita fue con motivo de un concierto que ofreció en 1998 en la antigua la Universidad Laboral de Las Palmas de Gran Canaria, en la actualidad el IES Felo Monzón.

La obra musical de Viglietti se caracterizó por una particular mezcla entre elementos de música clásica y del folclore uruguayo, así como latinoamericano. A partir de su segundo disco Hombres de nuestra tierra, comenzó a trabajar en la musicalización de poemas de escritores como Líber Falco, César Vallejo, los españoles Rafael Alberti y Federico García Lorca, y el cubano Nicolás Guillén, entre otros.

Sufrió el exilio durante la dictadura cívico-militar uruguaya (1973-1985) y entre sus composiciones más conocidas figuran A desalambrar - composición de 1969 que se convirtió en un himno internacional contra el latifundio y la propiedad privada- , Canción para mi América, Milonga de andar lejos y Gurisito, y algunas de ellas han sido parte del repertorio de artistas internacionales como la chilena Isabel Parra, el español Joan Manuel Serrat, la argentina Mercedes Sosa, la cantante mexicana nacida en Costa Rica Chavela Vargas o la venezolana Soledad Bravo.

Era un "luchador social, un cantautor enamorado de la belleza y de la justicia", tal como destacó su esposa, la mexicana Lourdes Villafaña. "(Hay que seguir) recordándolo vivo, fuerte, apasionado, con sus canciones, con su compromiso, un compromiso que siempre mantuvo durante toda su vida y hasta el final, con su gusto por el canto, por la belleza, por la naturaleza y los Derechos Humanos", dijo Villafaña.

Villafaña lamentó el fallo cardiaco que acabó con la vida de Viglietti mientras era sometido a una operación quirúrgica y dijo que espera que "siga viviendo en el corazón de todos". Señaló que Viglietti estaba componiendo canciones para un nuevo disco y que ahora, junto con los amigos de la familia, estudiarán la manera de mantener vivo su legado.

El músico uruguayo Eduardo Larbanois, por su parte, dijo que Viglietti "es de los imprescindibles", un "referente fundamental" de la música "por su compromiso con el oficio, no sólo en lo social sino también en la propuesta artística".

Por su parte, el expresidente de Uruguay José Mujica señaló que que Daniel Viglietti, fallecido ayer, sembró "semillitas de utopía" por "un hombre y una Humanidad un poco mejor". "Este hombre y esta guitarra, y este decir y este cantar durante 40 y pico de año, estuvo sembrando semillitas de utopía, de tradición y de sueño de un hombre un poco mejor, de una Humanidad un poco mejor", dijo un emocionado Mujica a la prensa al acudir al velatorio. En su opinión, Viglietti Montevideo en 1939, pertenece a una época de la que ya van "quedando muy pocos" y expresó que "tal vez la sociedad uruguaya, en el terreno de la cultura, esta pagando el precio de la dictadura".