Después de observar que muchos mapas de África se dibujan con la tinta de los clichés, las tragedias o los intereses, la bailarina y coreógrafa Aïda Colmenero (Madrid, 1981) se propuso cartografiar el continente africano a través de la poesía, la danza y la mirada femenina. Así pergeñó el emocionante proyecto Ella Poema (She Poem), que transforma extractos poéticos escritos por mujeres africanas en poesía en movimiento, con el objetivo de "reescribir el mapa de África a través de las voces de las mujeres africanas", señala Colmenero.

Aunque su esencia es el poder transformador del arte, "la danza y la poesía son sólo la herramienta: el trasfondo del proyecto es cambiar muchas cosas a nivel local y global", apunta Colmenero.

Y para comprender el potencial de la experiencia hay que remitirse a la técnica Acogny, un lenguaje coreográfico acuñado por la bailarina y profesora franco-senegalesa y septuagenaria Germaine Acogny que, a día de hoy, constituye la única técnica de danza contemporánea africana codificada, reconocida y valorada a nivel internacional. Colmenero es la única titular española -y la segunda en Europa- con licencia para impartir esta técnica en todo el mundo, lo cual comporta "una responsabilidad histórica y un enorme privilegio", confesó la pasada semana en un encuentro en Casa África.

La bailarina madrileña recaló en Las Palmas de Gran Canaria para brindar una serie de talleres de danza contemporánea al abrigo del Festival Masdanza (Festival Internacional de Danza Contemporánea de Canarias), que culminó ayer su 22ª edición, con la colaboración de Casa África y al ritmo de la percusión senegalesa de los Hermanos Thioune. Todas sus sesiones desbordaron el límite de inscripciones previstas.

Y la Técnica Acogny, que bebe de la danza tradicional africana y de las técnicas contemporáneas occidentales de baile -danza clásica, la técnica Graham y release-, se basa en el trabajo con la columna vertebral; en la conciencia plena del cuerpo y de la tierra, y en "jugar a ser como animales o plantas". "He impartido muchos talleres en países de todo el mundo, sobre todo, en España y Alemania, donde trato de mostrar qué es África a través de la Técnica Acogny y bajo mi propio prisma. Y a partir de este trabajo surgió Ella Poema", revela.

Formada en la madrileña Escuela de Interpretación de Cristina Rota, Colmenero trabó contacto con su mentora en la famosa L'ecole des Sables, centro de danza africana contemporánea radicado en Senegal e impulsado por Acogny en 1998, donde ha instruido y moldeado a hornadas de bailarines en su técnica homónima.

A caballo entre España y el continente africano, Colmenero ingresó en la escuela senegalesa en 2009 y, al año siguiente, fue seleccionada por la propia maestra como una de las selectas depositarias de los secretos de la Técnica Acogny, con el objetivo de dar continuidad a su desarrollo y transmisión alrededor del mundo.

Y en este contexto, después de tres años afincada en Senegal para instruirse en las entretelas de la técnica, Colmenero engendró el proyecto Ella Poema, al constatar que "la tradición de la danza africana ha estado siempre dominada por los hombres". "La idea es crear referentes femeninos en la danza contemporánea africana y construir un nuevo mapa de África a partir de conceptos universales y positivos ligados a la mujer, la poesía y la danza, como son la belleza, la luz, el color, la música, el cuerpo y la tierra", expone Colmenero.

Este mapa de empoderamiento femenino se articula como un mosaico de pequeñas piezas audiovisuales construido a partir de bailes de poesía en movimiento. Sus protagonistas son mujeres de distintos países de África y cada bailarina pone en práctica la técnica Acogny inspirándose en las raíces de su propia tierra, sus ritmos y lenguajes, toda vez que el denominador común de los cortometrajes es la libertad en movimiento del cuerpo femenino. La articulación de estos vídeo-poemas bajo el paraguas de Ella Mujer muestra a través del baile la riqueza y la fuerza de la mirada femenina y, además de tender un puente entre la realidad de la mujer africana y española, lucha por quebrar "los estereotipos y simplificaciones que pesan sobre la imagen de la mujer africana", apunta Colmenero.

Ella Poema se presentó en premier mundial en el Kinetic Cinema, en Nueva York, el pasado 2015 bajo el epígrafe de "rendir tributo a la mujer artista africana a través de la literatura" y "dar visibilidad de la mujer africana como creadora y referente en su entorno". El proyecto ha desfilado por distintos países africanos, como Kenia, Nigeria, Camerún, Sudáfrica, Namibia, Mozambique y, próximamente, Ruanda. "Existen muy pocas escuelas de danza contemporánea en África", señala Colmenero. "Más bien, se forman agrupaciones de danza contemporánea en distintos puntos. Por eso, el trabajo de Acogny ha sido histórico, porque a través de su escuela ha convertido la danza en un valor cultural en África y ha creado un mapa de África unida a través de la danza".

Y esa línea de puntos que traza la técnica Acogny no se basa en corsés o parámetros cerrados, sino que "el espíritu Acogny consiste en trabajar con la alegría y con todo el cuerpo, en sentir la tierra y conectar con la naturaleza, con el otro, con el cielo, con tu cuerpo, con el placer". Su objetivo es seguir derribando fronteras con Ella Poema en Europa y África, así como mover el proyecto en todos los países y continentes pendientes, como Asia o Latinoamérica.