El cine de la excepción, la vanguardia, la ruptura, lo experimental y la mirada autoral inscrita en distintas geografías y códigos artísticos vuelve a citarse en el Festival Internacional de Cine de Las Palmas de Gran Canaria, que celebra su 18ª edición entre el seis y el 15 de abril con la proyección de 136 películas -97 largometrajes y 39 cortos- repartidas en 210 sesiones en las pantallas del Teatro Pérez Galdós, Multicines Monopol y el Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología.

La articulación de esta extensa programación, que incorpora una veintena de películas más con respecto a 2017, vuelve a estar coronada por su sección oficial, donde este año concurren 12 largometrajes, más otros dos fuera de concurso, y 12 cortometrajes en calidad de premiere en España, lo cual significa que viven su estreno a escala nacional en el 18ª Festival de Cine de Las Palmas. "Efectivamente, son 18 años, que en el caso de una persona implica mayoría de edad pero que, para un festival, indica veteranía sobradísima, a pesar de lo cual cada festival es siempre un experimento", declaró ayer Luis Miranda, director del certamen, quien destacó también que "el público ha ido respondiendo año tras año" y "ya no nos dice ´qué cine tan raro´, sino que nos piden que sigamos explorando ese otro cine alejado de lo convencional".

Entre los platos fuertes del apartado oficial destaca Insects (República Checa, 2018), del artista y animador surrealista Jan -vankmajer, referente en la cinematografía animada contemporánea, cuyo filme se proyecta fuera de concurso a petición del propio cineasta, quien, a sus 83 años, sigue en la batalla pero renuncia a competir, tal como acordó con el equipo de programación, que en 2010 le dedicó un ciclo retrospectivo. El segundo título oficial fuera de concurso es El pintor de calaveras (España, 2018), documental sobre el artista Pepe Dámaso, dirigido por Sigfrid Monleón y producido por Andrés Santana, que se estrena en la gala inaugural en el Teatro Pérez Galdós, con la presencia de estos tres.

Concurso

Los 12 títulos oficiales a concurso, que compiten por la Lady Harimaguada de Oro, atesoran un destacado recorrido en festivales de prestigio como la Berlinale o Rotterdam. Aunque se inscriben en nacionalidades y géneros diversos, "las películas de la sección oficial establecen puentes entre sí y acaban encajando en una visión de conjunto muy coherente", según Miranda. Entre las apuestas de autores consagrados destacan The green fog, de Guy Maddin, junto a Evan y Galen Johnson (EE UU, 2017), un collage cinematográfico que rinde homenaje al Vértigo de Alfred Hitchcock; o Transit, de Christian Petzold (Alemania, 2018), un juego experimental identitario en el contexto nazi.

Ambos títulos, programados en la Berlinale, integran el programa oficial, al que se suman títulos procedentes de Irán, India, Reino Unido, Grecia y Albania, Argentina, Rusia, Lituania y China, que se proyectarán en el Teatro Pérez Galdós, buque insignia del certamen capitalino desde el pasado 2017. Por otro lado, se exhiben 12 cortometrajes a concurso, apartado que se retomó hace dos años y que brinda una selección de los mejores trabajos del circuito de festivales.

Y un año más, el apartado competitivo abre una ventana al cine creado en el Archipiélago al abrigo de su sección fija Canarias Cinema, donde este año concurren cuatro largometrajes, más otro fuera de concurso, y 14 cortometrajes.

Ciclos

Pero uno de los acontecimientos de la programación es que gravita por primera vez sobre dos efemérides: la revolución contracultural de Mayo del 68 y el estreno de 2001: Una odisea en el espacio, de Stanley Kubrick, que conmemoran su 50º aniversario. El certamen programa dos ciclos en homenaje a ambos hitos, a los que se suma un tercer ciclo dedicado al cineasta Radu Jude, referente en la nueva ola de cine rumano, que visita el certamen como parte del jurado oficial y con una selección de ocho películas y medio bajo el brazo.

El ciclo Revolución 68 rinde homenaje a la rebelión de las formas del cine que emergió de la agitación política en el mayo francés de 1968 y que, por otro lado, ha inspirado la línea programática del festival capitalino en los últimos años. Por tanto, "también sitúa un punto de referencia que permite entender mejor el cine que llevamos programando durante 18 años", refirió Miranda sobre "esta síntesis entre voluntad vanguardista y cambio radical en la práctica cinematográfica" que cristalizó "en un segundo nacimiento del cine". El ciclo suma 15 películas de cineastas de referencia, entre otras: Black Panthers: Free Huey!, de Agnès Varda (Francia, 1968), La Chinoise, de Jean-Luc Godard (Francia, 1967), Porcile, de Pier Paolo Pasolini (Italia, 1969) o Peppermint Frappé, de Carlos Saura (España, 1967).

Por su parte, Estrella Roja conmemora medio siglo de estreno de 2001: Una odisea del espacio, pero sin 2001: Una odisea del espacio, dado que Warner retiene sus derechos durante gran parte del año. Como contraaque, el certamen proyecta en el Museo Elder cinco películas coetáneas o influyentes en la obra maestra de Kubrick, pero fraguadas al otro lado del telón de acero: Eolomea, de Herrmann Zschoche (RDA-URSS-Bulgaria, 1972), Ikarie XB-1, de Jindrich Polàk (Checoslovaquia, 1963), Who wants to kill Jessie, de Václac Vorlícek (Checoslovaquia, 1966), Planeta Bur, de Pavel Klushantsev (URSS, 1962) y Solaris, de Andrei Tarkovsky (URSS, 1972).

El tercer ciclo programado por Radu Jude, bajo el epígrafe Radu Jude 4½ + 4, engloba cuatro largometrajes y un corto de su filmografía, junto a otros cuatro títulos que influyeron en su carrera, desde Lucian Pintilie a Yasujiro Ozu.

Secciones fijas

El resto de la programación se distribuye en las secciones paralelas que configuran la arquitectura fija del certamen. Panorama realiza un seguimiento de los títulos y autores destacados de ese "otro cine", ajeno a los esquemas narrativos convencionales, que ha circulado en festivales en el último año. Este año, la panoramámica despliega15 películas, entre las que destaca Joaquim, de Marcelo Gomes (Brasil, 2017) o dos películas de Hong Sang-Soo, Claire´s Camera y The day after (Corea del Sur, 2017). Por su parte, Panorama España, sujeta al mismo criterio pero a escala nacional, proyecta cuatro largometrajes y seis cortos, como Niñato, de Adrián Orr (España, 2017), que concurrió en el último Mecas (Mercado del Cine Casi Hecho). Debe destacarse que Panorama España contará este año con la presencia de casi la totalidad de los cineastas, avanzó Miranda, toda vez que el Mecas reunirá en su segunda edición a cineastas y profesionales del sector audiovisual.

Por último, Linterna Mágica, dirigido al público infantil y juvenil, acoge dos pases abiertos y cinco concertados en el Pérez Galdós que gravitan sobre el universo de las redes sociales. Y last but not least, La noche + freak, maratón de cine de terror y gamberro programado por Jesús Palacios, exhibe tres largometrajes y otros tres cortos, también en el Pérez Galdós.