"Ya en el escaparate de la librería localizaste la portada con el título que buscabas. Siguiendo esa huella visual te abriste paso en la tienda a través de la tupida barrera de Los Libros Que No Has Leído que te miraban ceñudos desde mostradores y estanterías tratando de intimidarte. Pero tú sabes que no debes dejarte imponer respeto, que entre ellos se despliegan hectáreas y hectáreas de los Libros Que Puedes Prescindir De Leer, de los Libros Hechos Para Otros Usos Que La Lectura, de los Libros Ya Leídos Sin Necesidad Siquiera De Abrirlos Pues Pertenecen A La Categoría De Lo Ya Leído Antes Aún De Haber Sido Escrito. Y así superas el primer cinturón de baluartes y te cae encima la infantería de los Libros Que Si Tuvieras Más Vidas Que Vivir Ciertamente Los Leerías También De Buen Grado Pero...".

Este extracto de Si una noche de invierno un viajero, de Italo Calvino, dícese que representante de la posmodernidad en la literatura, glosa con tanto acierto como humor ese estado de ansiedad al que nos conminan los imperativos del disfrute en la era (pos)moderna. En vísperas del Día del Libro, los cauces informativos se desbordan en recomendaciones literarias y, aunque también la ciudad se inunda mañana de celebraciones librescas, los libros son para los 365 días, aunque el citado alud de estímulos arrolle precisamente placeres reposados como la lectura.

Lectores

Pese a todo, que el libro se sitúe en portada siempre es buena noticia, aunque cualquier bibliófilo con criterio sabe que, al hablar de libros, no vale cualquier libro. El listado a continuación se ha confeccionado con los mimbres del universo literario de quienes ejercen la literatura y que, precisamente porque la ejercen, son, ante todo, grandes lectores. Algunos constituyen sus libros de cabecera; otros, sus lecturas en curso; y en otros se trata, sencillamente, de libros que, citando a Milan Kundera, arañaron su "memoria poética", aquella que registra "aquello que nos ha conmovido, encantado, que ha hecho hermosa nuestra vida".

La poeta Tina Suárez Rojas, que brindó el pasado viernes una lectura poética en el Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM), recomienda Las últimas noches de París, de Philippe Soupault (Jus Ediciones, 2017). "Aunque menos conocido, tal vez, en su faceta de novelista, es esta una novela en la que la intriga de la trama es el pretexto del narrador para sumergirnos en una ciudad, París, casi siempre nocturna, insomne y seductora, que se convierte en la verdadera protagonista de la historia. Me atrevo a asegurar que la traducción de José Ignacio Velázquez Esquerra ha sido fiel a la prosa hipnótica, de exquisito trazo poético y de cadencia melancólica con que Soupault va hilvanado el relato detrás de una voz en primera persona a cuyo hechizo es imposible no sucumbir. Libro delicioso para quienes conciban la flânerie parisienne como otra forma de lectura".

En el terreno de la investigación histórica, el escritor Carlos Ortega Vilas, una de las voces emergentes de la novela negra en Canarias y autor de la recomendable El santo al cielo (Dos Bigotes, 2016), invita a leer El Holocausto: Las voces de las víctimas y los verdugos, de Laurence Rees (Crítica, 2017). "Uno de los principales méritos de este libro es, quizás, la capacidad de síntesis de su autor a la hora de mostrarnos la evolución del nazismo -y su política de persecución y exterminio- desde sus orígenes, con meticulosidad y rigor. Rees va tejiendo el relato apoyándose constantemente en testimonios hasta ahora inéditos -tanto de testigos y víctimas como de algunos de los verdugos- que ha ido recopilando a lo largo de las últimas décadas. Se agradece el estilo, conciso, directo, sin retórica inútil", manifiesta, a lo que añade "extremadamente crudo en ocasiones". En esta línea, el novelista también recomienda Memorias de un antisemita, de Gregor von Rezzori (Anagrama, 1988) y En el corazón de la zona gris. Una lectura etnográfica de los campos de Auschwitz, de Paz Moreno Feliu (Trotta, 2010).

Y sobre la mirada a las heridas del pasado gravita también la recomendación literaria del escritor, editor y guionista Carlos Álvarez: El tiempo del sapo, de Dalton Trumbo (Artefakte, 2013). "Me parece que este libro vuelve a estar de actualidad con lo que está ocurriendo en este país", señala, ante lo que destaca "la valentía con la que fue escrito este libro en una época muy conflictiva en Estados Unidos, en el que un guionista y escritor defiende unos derechos constitucionales, como es el derecho a no tener que decir si milita o no en un partido, y que le expone a una caza de brujas terrible. Creo que es interesante volver a leerlo por su valentía ante ese abuso de poder".

Y mientras dure la vida, sigamos con la poesía. El poeta Octavio Pineda, Premio Pedro García Cabrera por ¿Qué piensa el león del horizonte? (Salto de Página, 2017), un diálogo poético con la pintura surrealista de Óscar Domínguez, reivindica el legado de uno de los grandes poetas del Archipiélago, recogido en parte en Manuel Padorno. Obras completas, Tomo II: 1991-2007 (Pre-textos, 2017). "El segundo volumen de estas obras completas, que incluye poemarios tan relevantes como Efigie canaria (1994), Canción Atlántica (1997-2003 ) o Edenia (2007), revela la culminación de toda la poética de Manuel Padorno: la existencia de otra realidad. Un espacio donde la retórica insular se convierte en cosmovisión y respuesta", manifiesta. Y en el campo del ensayo, Pineda recomienda Literatura y ciencia, de Aldous Huxley (Página Indómita, 2007): "Para conjugar dos corrientes de pensamiento dispares, como son el humanismo y la ciencia, deben reconocerse sus puntos de contacto y sus reproches. Huxley supera estas barreras y logra desarrollar un maridaje entre ambas corrientes, actualizando nuevos campos para la poetización, y aportando sensibilidad comunicativa al lenguaje científico".

El poeta Pedro Flores, que el pasado viernes presentó el poemario Los huesos del poeta (Diálogo de refugiados, 2018), una edición bilingüe en español y alemán, en la librería Canaima, brinda una nueva recomendación poética para la inmensa minoría: La caza del tigre, de Eduardo Lizalde (Editorial Visor), "una antología de la rigurosa obra del mayor poeta vivo de la poesía en español. Una obra, la del poeta mexicano, culta y de enorme altura estética, sin perder nunca de vista la humanidad que ha de tener la poesía. Poemas como los de Un tigre en la casa o Bellísima justificarían, por sí solos, esta elección".

Coordenadas

Y en otras coordenadas, la poeta Berbel apuesta por redirigir la mirada hacia "las literaturas de otros mundos", en concreto, de El Salvador, país que ha frecuentado con motivo de su Festival Internacional Literario de Santa Ana. A su juicio, el volumen Literatura Salvadoreña 1960-2000. Homenaje, al cuidado de Jorge Vargas Méndez y J. A. Morasan (Velado, 2008), "permite conocer la literatura salvadoreña desde el siglo pasado a la actualidad: qué se escribe en El Salvador, sus sentimientos, sus costumbres, sus emociones. Y en estos textos descubres que respiramos el mismo aire, sufrimos por los mismos dolores y nos reímos con los mismos placeres y los mismos amores". Además, Berbel recomienda el "divertidísimo" libro A Lupita le gustaba planchar, de Laura Esquivel (Suma, 2014), así como el libro de la exposición retrospectiva dedicada al artista Paco Sánchez, editado por el CAAM a través de su departamento de Publicaciones -la muestra puede visitarse en el centro hasta el 27 de mayo-.

Por su parte, el escritor Juan Carlos de Sancho propone recuperar al escritor lisboeta de los heterónimos, Fernando Pessoa, en su obra maestra, El libro del Desasosiego, que reedita Acantilado. "Es un libro de introspección sobre la propia vida del autor y sus ideas éticas y filosóficas. Escribía la poeta Alejandra Pizarnik que, si nombras al fantasma, lo matas. Y creo que Pessoa nombró en este libro a muchos de los suyos: la dificultad de vivir, la dificultad de sentir, la incertidumbre de ser quien eres, y todos los que llevas dentro", apunta.

Por último, Zaradat Domínguez, filóloga y librera de Azulia, invita a descubrir a la autora argentina que centró su recién culminada tesis doctoral a través de sus memorias: " Black out (Random House, 2017) es el libro transgresor de la periodista feminista María Moreno, que habla sin tapujos de su alcoholismo y del ambiente político e intelectual del Buenos Aires contracultural en medio de la última dictadura. Un libro distinto de una mujer a contracorriente".