Con un tiempo de 11,17 segundos, el australiano sumó así la primera de las tres preseas de oro (100 metros, 200 metros y 400 metros, su especialidad) a las que afirmó aspirar antes de dar comienzo la competición paralímpica.

Pistorius aseguró que la victoria fue difícil y que tuvo que "poner la sexta marcha" porque el hectómetro es la distancia en la que se siente "menos cómodo" ya que aventajó por sólo tres centésimas al segundo clasificado, el estadounidense Jerome Singleton.

"Confío en lograr otros dos oros y no me olvido de Londres 2012.

Llevo entrenando tres años y seguiré haciéndolo", expuso.

"Es genial formar parte de los Juegos Paralímpicos, sólo estoy feliz de tener la medalla", explicó sonriente el jovencísimo atleta (21 años), que se ha convertido en una de las máximas estrellas de la cita paralímpica incluso antes de empezar la competición.

El corredor, conocido como "Blade Runner", ganó en mayo la batalla legal para participar en los Juegos Olímpicos, pero se quedó fuera de éstos al no haber conseguido la marca que le habría incluido en el equipo olímpico nacional de 4x400 metros, ya que había al menos seis compatriotas con mejor tiempo.

La Federación Internacional de Asociaciones de Atletismo (IAAF, en inglés) arguyó que las prótesis en forma de "J" que le permiten caminar con normalidad podrían darle una ventaja sobre los atletas olímpicos, argumento que el Tribunal de Arbitraje Deportivo rechazó.