El piloto de MotoGP Valentino Rossi (Yamaha) se subió este miércoles de nuevo a un Ferrari de Fórmula 1, el 'F2008', en el primero de los dos días de pruebas que el italiano está realizando con la escudería en el Circuit de Catalunya, fruto de una promesa que le hizo el presidente ferrarista, Luca di Montezemolo.

Así pues, el seis veces campeón de MotoGP volvió a pilotar un 'cavallino rampante' después de haber vivido tal experiencia en diferentes 'tests'. En esta ocasión, es un premio por su actuación a los mandos de su Yamaha, y no por un posible fichaje por la escudería transalpina.

Sin embargo, no empezó con buen pie 'Il dottore' pues se salió de pista en la segunda vuelta por un trompo provocado por la humedad en el trazado catalán. Tras una hora de espera provocada por la salida, Rossi volvió a pista para hacer 8 vueltas seguidas y, tras una nueva parada en box para ajustar reglajes, dio otros 13 giros.

Pese al susto inicial, el italiano consiguió recortar 7 segundos en su mejor tiempo con respecto a las vueltas iniciales. Habrá que ver si mañana, en su último día de rodaje, sigue rebajando tiempo. La anécdota del día llegó cuando, después de salirse, fue remolcado por las asistencias del circuito hasta el box.