La temporada 2007-08 no es tan complicada de olvidar para los aficionados de la Unión Deportiva porque ha sido la mejor del último lustro. Y eso que aquel inicio de Liga, con Juanito a los mandos del equipo, había sido pavoroso. En las diez primeras jornadas del campeonato el tinerfeño había logrado sólo cinco puntos de treinta posibles. El bagaje era delicado y la situación, insostenible para buena parte de la grada, que bramaba por un relevo en el banquillo de manera urgente.

La derrota frente al Granada 74 en Siete Palmas fue la puntilla para el actual asesor del presidente. Juan Manuel Rodríguez aparecía entonces en escena, en su segunda etapa en la entidad, para afrontar un partido de órdago, un derbi frente al Tenerife en el Heliodoro Rodríguez López. El resultado esperanzador, empate a dos, y la buena imagen del equipo, a pesar de la baja del goleador Marcos Márquez llenó la despensa del Gran Canaria de buenos presagios. A partir de ahí, el equipo comenzó a dibujar una carrera meteórica que lo situó al final de la Liga en la octava posición de la tabla clasificatoria de Segunda.

El fútbol ligero de Trashorras, la capacidad depredadora de Adrián Colunga y Marcos Márquez, unido a la aportación de Christian Fernández y Samuel, fichajes invernales, propició que el conjunto de Juan Manuel Rodríguez encadenara una racha de resultados inimaginable en la prehistoria de ese campeonato. La aparición sorpresiva de Roberto Santamaría en la portería completó una plantilla, que probablemente sea la más completa desde que Miguel Ángel Ramírez se hiciera con la presidencia de la entidad.

Las Palmas se mostró con Juan Manuel en el banquillo como un equipo eficiente y fiable. En 32 jornadas, los amarillos lograron catorce victorias, alguna de ellas de mérito como la lograda frente al Sporting de Gijón en El Molinón, con el gol de Adrián Colunga; diez empates y ocho derrotas, con una cosecha de 52 puntos, que unidos a los cinco primeros del campeonato otorgaron una tranquilidad no observada hasta el momento.

El magnífico nivel exhibido por la Unión Deportiva en la fase final del campeonato, donde sólo conoció la derrota en Albacete (3-1) cuando todo estaba resuelto, le procuró al entrenador de La Isleta la renovación de su contrato para la siguiente temporada, 2008-09. El objetivo estaba cumplido y en la entidad de Pío XII se soñaba con reeditar una racha similar que llevara al grupo a las primeras plazas de Segunda desde el principio del campeonato. No hubo suerte en esa ocasión y el despido llegaría en las 16 jornada de Liga. En aquel momento, los amarillos ocupaban la 17ª posición de la tabla clasificatoria y estaban a un solo punto de la zona de descenso a Segunda B. Su relevo sería Javier Vidales, que sería destituido también antes de finalizar el torneo.

En las dos etapas en Las Palmas en 2003-04 y 2007-09, Juan Manuel Rodríguez ha dirigido 62 partidos de Liga con veinte triunfos, 24 empates y 18 derrotas. A su mando, los amarillos han conseguido 80 goles y han encajado 87. Unos números que comienzan a ser historia.