Fernando Bethencourt

- Sí, al principio fue complicado por lo rápido que se produjo mi fichaje, pero tanto mis compañeros como el entrenador me lo han puesto fácil.

- El Granca buscaba un pívot, usted no lo dudó y al día siguiente estaba en la Isla. ¿Fue una decisión fácil?

- Sí, no lo pensé mucho. Es a la vez una oportunidad y un reto.

- ¿Conocía algo de la liga española y del Granca?

- Sí claro, sabía que éste es un equipo de los que están arriba, siempre en play off y participando en Europa.

- ¿Es complicado asimilar el estilo de Pedro Martínez?

- No, es un estilo distinto a lo que he hecho este año pero ya lo he jugado antes y no es algo que sea nuevo. Sólo necesitaba adaptarme y creo que lo he logrado bastante rápido.

- ¿Sobre todo en defensa?

- Aquí se piensa mucho en la defensa en grupo y en las ayudas, así que si un jugador se equivoca el resto ayuda, esto es bueno.

- Su llegada se produjo por la lesión de Savané. Ahora le saluda en cada uno de sus cambios. ¿Qué tal ha sido el recibimiento del capitán?

- Desde el primer día intentó ayudarme y la verdad es que tengo muy buen trato con él, como con el resto, pero con él, no sé, creo que es especial. Su apoyo es importante. Los compañeros le adoran.

- ¿Es usted un pívot puro o más bien un ala-pívot?

- Tanto aquí como en Grecia estoy jugando más de cinco puro, pero antes lo compaginaba con el puesto de cuatro, pero creo que me va más el de cinco, que es lo que me pide el entrenador.

- Al formarse en el Partizan, sabrá lo que es jugar ante una afición caliente.

- Por supuesto. Allí están locos por este deporte, pero he de decir que me gusta mucho la que he conocido aquí, que es distinta y muy bonita, con un apoyo incondicional hacia los jugadores. Además, saben poner esa presión fundamental sobre el rival.

- ¿Ya sabe lo que es recibir el aplauso del CID?

- Sí. El equipo está ganando y la gente esta feliz, así que recibir su cariño, sin importarles cómo lo hayas hecho tú individualmente es algo bonito y de agradecer.

- Tras ganar al Bilbao, después de dos prorrogas, los compañeros intentaron dejarle solo pero usted se dio cuenta a medio camino.

- Sí [se ríe]. Quisieron gastarme una broma de bienvenida pero yo ya conocía el truco de verlos en la NBA, así que me pude parar a tiempo. Soy tímido.

- Desde su llegada, tres partidos ganados y uno perdido, ¿se esperaba una llegada triunfal?

- A mí me gusta ganar pero eso ya no cuenta. Quedan seis partidos y me limito a dar el máximo e intentar ganar en cada uno de éstos.

- ¿Qué es lo que más le ha sorprendido de su equipo?

- El ambiente. Siempre he visto buenos ambientes pero éste es más que bueno. Entrenamos muy duro pero siempre hay tiempo para alguna broma, buscamos retos y después hacemos vida juntos. En el Partizan era similar pero la verdad es que mejor que éste no lo he visto nunca.

- ¿Queda mucho Borovnjak por ver y disfrutar?

- Sí, seguro. Sé lo que puedo hacer y voy a jugar mucho mejor. Voy despacio pero seguro.

- ¿Le gustaría seguir la próxima temporada?

- Me encuentro muy bien en la Isla, no solo en los entrenamientos y en la pista, también en la calle. Me gusta mucho la vida en Gran Canaria, así que me gustaría quedarme, aunque es algo que se verá al final de la temporada.

- ¿Le ha hablado Moran de su obsesión por pasar una ronda de play off?

- No, pero veo cómo entrena y se esfuerza todos los días. Siempre quiere más.

- ¿En unos meses podría pasar a la historia del club si supera una eliminatoria?

- Todo jugador juega para ganar trofeos y pasar eliminatorias, esto es lo mejor que se puede lograr.

- ¿Cuál es su mejor deseo para lo que queda de liga?

- Que el equipo dé el máximo de sus posibilidades. Con la calidad de este grupo, en mi opinión, será suficiente no solo para llegar a los play off sino para hacer un buen papel. Yo veo un equipo muy unido y fuerte.