La intención de cualquier jugador con ambición no es solo llegar sino permanecer". Habla Javier Alvarado, ex canterano del Granca y hermano del actual base claretiano que sabe que el baloncesto es un camino de subidas y bajadas, una montaña rusa en la que hoy puedes estar arriba y mañana abajo. Por eso, el club insular mide con prudencia los primeros pasos del playmaker satauteño en la difícil tarea de gestionar su éxito. Mientras, ante la prometedora irrupción de su hermano Óscar en la ACB, Javier pide prudencia y confianza, al tiempo que, con valentía, expone su propia historia.

"Yo creo que mi ejemplo le debe de servir para saber que tiene que trabajar con humildad y que debe apostar fuerte por el basket pero sabiendo que hay circunstancias externas que le pueden llevar un año a La Palma después a Gran Canaria y que el próximo no se sepa", asegura Javier y es que en sus inicios, él también probó las mieles del éxito al debutar en la ACB con 18 años, un 30 de noviembre de 2003, en un partido frente al Fórum Valladolid. Ese día Javier, con el siete a la espalda que hoy luce el capitán Savané, consiguió tres puntos y un rebote. Fue el primero de siete partidos en los que este valor de cantera suplió durante un mes, la baja por lesión de Gonzalo Martínez, de la misma manera en la que Oscar hizo hace un año con Taurean Green y ahora repite ante la baja del mismo.

"Por suerte mi hermano ha tenido mi ejemplo en casa", repite Javier antes de añadir que: "Él sabe que hoy puede estar en la ACB como he estado yo con 18 años y con 23 estar en EBA, después con 25 en LEB Oro. Gracias a esto, él sabe que está en un mundo muy inestable y en el que tiene que trabajar día a día para labrarse un futuro".

Un salto de calidad

Antes, en categoría Junior, en los que fueron sus dos últimos años de formación de cantera, Javier los pasó en el centro de alto rendimiento de Bilbao, denominado Siglo XXI, donde coincidió con Sergio Rodríguez. En ese momento, él era el base titular y el ex NBA tinerfeño, Sergio Rodríguez, era su suplente. Las expectativas sobre su futuro eran muy altas pero la estabilidad profesional en la máxima categoría nacional es una suerte que se vende a precio de oro. "Muchos han entrenado con el primer equipo pero para mantenerse y competir se necesitan muchos factores", reconoce el base ahora en filas del Gandía Basquet de la Adecco Plata, que entiende y justifica en cierta manera la falta de referentes canarios en la primera plantilla insular desde la salida de Roberto Guerra. "El salto a la ACB y a la liga profesional es muy complicado y se necesitan tener unas capacidades que no todos los jugadores tienen, a todos los niveles tanto físicos como táctico de talento o a nivel mentales".

El Gran Canaria ha estado siempre en una situación complicada, según apunta éste. "No es un club que se pueda permitir dar oportunidades gratuitamente. De cierta manera va un poco al límite para entrar en play-off y cumplir con los objetivos. Por eso es difícil, en esta situación, darle oportunidades a los jugadores".

En este sentido, Javier destaca el paso por el UB La Palma en la formación de Oscar, un acierto por parte de la entidad, según advierte, y una gran ayuda con la que cuentan las jóvenes promesas del presente claretiano. "Yo creo que Óscar ha madurado mucho. El paso por la Adecco Oro le ha servido a nivel competitivo ya que viene de una competición de mucha exigencia y eso le ha permitido que cuando le ha llegado su oportunidad en el Gran Canaria haya dado la talla", destaca el hermano mayor que tiene claro que si se dan las circunstancias, Óscar puede tener una carrera solida en su propio club.

El valor del entrenador

"Mi hermano tiene una cosa muy buena y es que le gusta el baloncesto por encima de cualquier cosa y considero que amar tu profesión es la primera de las claves", apunta éste, antes de añadir, "yo hablo con él y no le veo ni acomodado ni estancado, sino todo lo contrario. Está ante la oportunidad de su vida. Sé que está entrenando como un animal y lo está dando todo para que Pedro se fije en él, cosa que está haciendo. Ha apostado por Óscar y le ha dado minutos de mucha responsabilidad". El elogio de Javier hacia el técnico catalán del Granca no es gratuito. El propio Pedro Martínez fue el valedor de Javier Alvarado en su debut ACB. "Ya en su momento apostó por mí y ahora lo hace con Óscar y no es fácil darle minutos a un base de 19 años", destaca éste.

Por último, el mayor de los Alvarado no se atreve a dar un consejo. "Lo está gestionando de una manera tan profesional que poco le puedo decir. Solo que siga con humildad y en la misma linea. Así probablemente termine llegando en esta carrera que es de larga distancia y donde triunfa el que más trabaja y el que menos se lo crea. El talento y las aptitudes las tienes, si además le añade la actitud tiene todo para triunfando". Palabra de hermano.