La gran noche del Flaco. Conquista sentimental para el marqués barroco. Juan Carlos Valerón (Arguineguín, 1975) considera que el ascenso logrado con el Deportivo [club en el que militan los grancanarios Manuel Pablo y Aythami] ha sido el mejor capítulo de su extensa carrera. "Vale por dos Champions; se lo debíamos a la afición de Riazor y ahora ya podemos decir que estamos donde merecíamos. El descenso fue un golpe duro pero aquellas lágrimas nos han hecho más fuertes", detalla el grancanario, que el pasado domingo no pudo disputar la penúltima jornada de Liga de Segunda ante el Huesca por una lesión muscular.

Del drama a una preparación milimétrica. Valerón argumenta que tras el descalabro de perder la categoría en Riazor, ante el Athletic en la última jornada del pasado campeonato, había que recomponer la identidad del equipo. "Renovar a jugadores importantes el pasado verano y mantener el bloque fue un paso vital. Además, la contratación del técnico -José Luis Oltra- fue otro punto a favor. Pero sobre todo, el compromiso del vestuario por estar a la altura y sacrificarnos por una afición increíble".

Cuestionado por su futuro, tiene vinculación con el club gallego hasta 2015, Valerón abre la puerta a una posible retirada en este verano. "De ese tema prefiero no hablar; tenía que dejar al Depor en Primera y lo hemos logrado. Eso es lo más importante, no sé si seguiré para jugar la máxima categoría. Ahora mismo, lo que más me llena es sentir la satisfacción de todos los aficionados del Deportivo; incluidos los seguidores que hay en Canarias", valora.

Icono de magia y exponente del mejor Deportivo de la historia -que tocó techo tras eliminar al Milán en los cuartos de final de la Liga de Campeones y besar las semifinales- ha completado en esta temporada 2.950 minutos y 39 partidos (solo se ha perdido dos por lesión).

Internacional absoluto en 46 ocasiones, disputó la fase final de las Eurocopas de 2000 y 2004, así como el Mundial de corea y Japón, el exjugador de la UD insiste en la carga sentimental de su primer ascenso a Primera. "Esto es lo más grande que me ha pasado en mi vida".

Manuel Pablo, que celebró el ascenso con una bandera de Canarias en Riazor, y Aythami también forman parte del viaje más hermoso de Valerón. Grancanarios de oro en la reconquista del Deportivo de Lendoiro.

Emperadores de bronce

La alegría de Valerón, Manuel Pablo y Aythami se une a la euforia del cuarteto de bronce. Nauzet Pérez, meta del Mirandés y ex de la UD, y Rayco, forjado en la cadena de la Junta del Puertos, formaron parte de la mayor hazaña del equipo de moda del fútbol nacional. Tras eliminar al Atlético Baleares, el reciente semifinalista de Copa-fue apeado por el Athletic de Bielsa- alcanza por primera vez en su historia la categoría de plata.

Nauzet es la bandera de un equipo que la próxima campaña se citará con la UD o el Sporting de Gijón. Por su parte, Rayco reforzó al cuadro rojillo en el pasado mercando invernal tras desvincularse del Rayo B.

Los grancanarios Jesé y Mandi, con la elástica del Madrid Castilla, golearon al Cádiz y también saborean las mieles del ascenso. Ahora, se citarán con el Mirandés de Nauzet para buscar la corona del mejor escudo de bronce del planeta fútbol.