¿Qué se puede sacar en positivo del partido del sábado?

Hubo pocas cosas positivas. Fue una derrota 1-3 y todo el mundo se fue fastidiado para casa. Sin embargo, todavía estamos empezando la temporada, debemos tener tranquilidad, sabemos que debemos corregir errores, pero hay tiempo para hacerlo. Hay gente nueva, un nuevo concepto de juego y hay que dejar espacio para que se vayan asumiendo las ideas y el trabajo del entrenador. Es mucho pedir, pero hay que tener paciencia.

A usted se le vio crispado en determinados momentos del encuentro.

Sí, porque había muchas ganas de hacer un buen partido, de agradar y de hacer las cosas bien. Los tres puntos se debían quedar en casa y te duele lo que estaba ocurriendo. Todo ello hace que te calientes, que intentes meter ganas al equipo, que pidas tranquilidad en determinados momentos. Debemos ser fuertes en casa, ése era el cabreo que tenía. No iba más allá de un enfado del momento.

Estuvieron fuera del partido desde el inicio, no les salía ni lo más sencillo...

Se pusieron muy rápido con 0-2. Nos volvimos a meter en el partido antes del descanso con mi gol. La gente se fue para arriba, con ganas. La segunda parte empezamos bien, con algunas ocasiones, con buen juego, pero después nos vuelven a meter otro gol. Eso hizo mucho daño al equipo. Nos partimos en el campo, fuimos con más corazón que cabeza y cada uno intentó ayudar al equipo a su manera.

¿Es difícil asumir las ideas del entrenador?

No lo creo. El primer partido lo hicimos bien, en los demás no lo hicimos del todo mal. El sábado ha sido el único partido donde no hemos tenido ideas. Se puede perder, es evidente, pero siempre con cabeza y con nuestra filosofía. La derrota nos enseña a mantener el estilo, a ser fieles a la idea, y no cada uno hacer la guerra por su cuenta.

¿Las derrotas han sido un baño de realidad sobre la categoría?

Todos sabíamos que esto iba a ser difícil. Esto es muy largo y sabemos que la dinámica se puede cambiar haciendo las cosas bien. La gente está dolida, pero estamos dispuestos a cambiar cosas y ser otro equipo el miércoles en la Copa y el domingo en Gerona.

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