¿Cuándo fue la primera vez que vio a la UD Las Palmas?

Mi padre siempre ha sido aficionado y cuando era pequeño, tendría cinco o seis años, me llevó a ver un partido de la Unión Deportiva, que estaba en Primera División, en el Insular.

¿Recuerda cuál era el rival?

No estoy muy seguro, pero creo que fue contra la Real Sociedad, porque por aquel entonces, aunque fuera muy pequeño, todos los niños teníamos a Arconada [portero de la Real y de la selección española por aquel entonces] como un icono.

¿Qué recuerda de aquel día?

El olor a césped, con el campo regándose antes del partido. También recuerdo la impresión que me provocó entrar por primera vez en una instalación deportiva grande. Y, sobre todo, los jugadores calentando y el ambiente que se iba generando poco a poco. Detalles como esos, si eres una persona a la que le gusta el deporte, como es mi caso, provocan que te enamores del equipo al que vas a ver con tu padre y que genera todo tipo de emociones. La verdad es que cho de menos esos momentos en el Estadio Insular.

¿Y quién fue su primer ídolo?

(Se lo piensa mucho) Koke Contreras. Para mi generación, que todavía pudo ver al equipo unos años más en Primera División, fue un futbolista que dejó huella porque marcaba la diferencia. Fue el primero que me impactó, pero después también me gustaron otros muchos. Pepe Juan, con el equipo aún en Primera, era un jugador de mucha clase. También tengo buenos recuerdos del Pollo Vidal, en su primera etapa en el equipo. Y de Pérez, porque a mí me gustaban mucho los porteros. Las primeras temporadas de Zeljko Cicovic fueron muy buenas. Y no me olvido de Vinny Samways. Que yo haya visto, porque la historia está ahí y la Unión Deportiva Las Palmas ha contado con grandes futbolistas extranjeros, para mí ha sido el mejor jugador foráneo. Es recordado por sus prontos, pero era un jugadorazo y dio un nivel espectacular.

Y de niño, ¿soñó con jugar algún día en la UD Las Palmas?

No, no. Jugaba en el equipo de mi colegio, primero en los Jesuitas, donde recuerdo que una vez la plantilla de la Unión Deportiva realizó una visita a las instalaciones del centro, y luego en el Garoé, pero el fútbol no era lo mío.

¿En qué posición jugaba?

Era delantero.

¿Delantero goleador?

Bueno, no se me daba mal. Tengo dos copas pequeñas, que eran una réplica del trofeo de la Copa del Rey, que gané por ser el máximo goleador en unos torneos que se organizaban en el colegio. Luego, ya en la Universidad, en el primer año de la carrera, monté un equipo de fútbol. Era jugador y, al mismo tiempo, ejercía de entrenador. Recuerdo que íbamos a entrenar al campo de la Junta del Puerto, cuando el terreno de juego aún era de tierra. Quedamos sextos en un torneo con siete equipos.

¿Cuáles son los mejores recuerdos que tiene de la UD?

La remontada contra el Real Madrid en 1986. Con 0-3 en contra nadie daba un duro por nosotros, pero con Koke Contreras, Narciso y Santis, al final, la Unión Deportiva ganó 4-3. Recuerdo que esa misma temporada, con Ruiz Caballero como entrenador, el Barça también perdió 3-0 en el Insular. Fue un año bonito, porque se luchó por la permanencia, pero el equipo dejó grandes momentos. Otro partido del que no me olvido es el correspondiente a la vuelta de una semifinal de la Copa del Rey, en 1984, contra el Barça. En la ida, en el Camp Nou, perdimos 2-1 y en el Insular el encuentro acabó con victoria 1-0 de la Unión Deportiva, un resultado que con el actual sistema de competición nos hubiera metido en la final. Fue un partidazo y la eliminatoria se resolvió en la tanda de penaltis, donde Manolo López paró un lanzamiento del Barça y donde fallaron, si no me equivoco, Contreras y Félix.

No nos dejemos atrás los diferentes ascensos.

En 1996, cuando el equipo subió a Segunda División con Pacuco Rosales, prometí que si se lograba el ascenso, me bañaba la noche del ascenso en Las Canteras. Y lo cumplí. Nadé hasta la barra. Ese partido, en Elche, no se me olvida. Como otros muchos. He sido abonado toda mi vida. Antes, como aficionado, iba hasta los entrenamientos.

¿Y los peores recuerdos?

La muerte de Roque Olsen. Nunca lo conocí, pero era un hombre que me caía bien. Siempre que cogía al equipo era capaz de extraerle el mejor rendimiento. Para mí fue un momento clave en la historia del club, porque después de un mal inicio con Brindisi de entrenador, con él al mando Las Palmas se recuperó e iba lanzada. Y tras su marcha, por la enfermedad, pasaron varios entrenadores, ninguno dio con la tecla y acabamos bajando a Segunda B con la conversión en Sociedad Anónima Deportiva en el aire.

¿Compró acciones?

Sí. Rompí la hucha y compré dos acciones. En aquel momento la ilusión era salvar al club.

¿Cómo ve esta temporada al equipo? ¿Es el año de la UD?

Creo que estamos ante una oportunidad histórica. Sé que es difícil. La categoría es dura y hay buenos equipos pero, si la Unión Deportiva se pone en su sitio, ni siquiera el Elche es mejor. Quedan ocho partidos y creo que el mejor plan para afrontar este tramo es pensar sólo en el encuentro inmediato y mirar sólo lo nuestro. Pienso que si gana los ocho partidos, sube directo. Pero hay que ir paso a paso. Y hay que salir a morir, como si cada uno fuera una final.

De la plantilla actual, ¿cuál es su jugador favorito?

Dani Castellano. Me gusta también su hermano Javi, pero Dani me ha sorprendido gratamente. A principio de curso no figuraba entre los laterales izquierdos del equipo y se ha hecho con el puesto. Es la revelación del año. Tiene una buena arrancada y desahoga el juego por su zona. También me gusta mucho Murillo, por su calidad y tranquilidad. Vitolo es un jugadorazo y Nauzet es clave.

El otro día el equipo notó los problemas físicos de Nauzet.

Sí. Él y Momo son claves en este equipo. Y la sensación que da, desde fuera y sin querer meterme a entrenador, es que el equipo llega muy justo. Espero, y estoy seguro de lo que hará, que Sergio Lobera sea capaz de dosificar el desgaste de una temporada tan dura.

¿Se sufre en el palco?

Se sufre, se sufre. Reconozco que vivo mucho el deporte y a veces me cuesta contenerme. Hoy soy consejero, pero mañana seguiré siendo aficionado y abonado del equipo y quiero lo mejor para la Unión Deportiva.

¿Qué significaría para Gran Canaria un ascenso de la UD?

El fútbol es mucho más que un deporte. Y para Gran Canaria, que vive del turismo, ganar en repercusión mundial siempre es bueno.

Si la UD Las Palmas asciende, ¿promete otro baño nocturno en Las Canteras como en 1996?

Lo prometo. Estaría encantado de repetir la experiencia, porque aquel fue un baño agradable.