El titular del juzgado número 1 de lo Mercantil de Las Palmas ha desestimado la pretensión del expresidente de la UD Las Palmas Manuel García Navarro de recuperar el 32,05 % de las acciones en la sociedad anónima deportiva del club amarillo.

El juez Alberto López Villarrubia rechaza la demanda de fijar el capital social de la entidad en 3.512.170,50 euros, ya que considera que el vigente y válidamente constituido desde la junta general de accionistas de 22 de mayo de 2006 asciende a 1.769.080 euros, correspondientes a 18.820 acciones, de 94 euros cada una.

Según se informa en la página web de la UD Las Palmas, la sentencia resalta "en varias ocasiones" que García Navarro actúa de un modo "contrario a la buena fe" al pretender discutir cinco años después unos acuerdos refrendados por él mismo. "Debe estimarse la alegación de vulneración de las exigencias de la buena fe en la impugnación de los acuerdos sociales", explica el magistrado, "y también en cuanto a la pretensión de la declaración de ineficacia del acuerdo de reducción y aumento simultáneo de capital social, considerando que los citados demandantes (García Navarro y sus empresas Districo y Plaza Verde) han ido en contra de los actos propios".

El juez resalta en el fundamento de su sentencia que García Navarro no es creíble cuando discute un acta de junta de accionistas en la que ha firmado como interventor de la misma. "Este tribunal no considera verosímil", relata textualmente, "que García Navarro ignorara la supresión de condición tan relevante en la operación de reducción y aumento de capital social". El tribunal advierte por último que "García Navarro había sido administrador de la sociedad demandada hasta la junta general de 8 de julio de 2005 y conocía perfectamente la pésima situación económica en que se encontraba aquella, inmersa en un procedimiento concursal, con un pasivo superior a los 65 millones de euros".