Elliot Artiles, que figura como uno de los denunciados por la Fiscalía de Las Palmas, por los hechos acontecidos al término del UD-Córdoba del pasado playoff de ascenso en el Gran Canaria, reconoce a este medio que asume la pena. "He aprendido la lección y trato de pasar página con la ayuda de mis seres queridos. Ha sido duro para mí y mi familia; tuve que ir a declarar y tendré que afrontar una multa de 120 euros. De igual manera me han comunicado que no puedo ir al estadio, durante la próxima campaña, y también lo asumo".

Con entrada en la grada Naciente, el isleño ha reiterado que no se siente el culpable de lo acontecido. "Yo también quiero y me siento de la UD Las Palmas. Fue una desgracia tremenda para todos, lo que pasó el 22-J, pero ya me he levantado de aquel palo", concreta.

El joven aficionado amarillo desconoce la identidad de los otros dos denunciados. E insiste que su gran preocupación ahora es cumplir con la justicia y desea lo mejor al cuadro grancanario. "Ojalá podamos celebrar un ascenso, en junio del 2015. Sólo quería abrazar a mis ídolos y al final todo se torció".

Un proceso abierto

Amarillo de corazón y fiel seguidor de la UD, Elliot se disculpó a través de los ejecutivos del Córdoba de su conducta en el césped. El arrepentimiento no le ha bastado para esquivar la respuesta implacable de la ley, que se hace pública un mes y una semana después del 22-J.

La lista de siete denunciados se podría ampliar en los próximos días. La Fiscalía ultima la elaboración de un informe más amplio y sigue en el proceso de identificación de aquellos aficionados que se vieron envueltos en una tangana gigante. Además, también existen pruebas gráficas y videográficas de actos vandálicos como la rotura de cristales y el hurto de material de la instalación deportiva.

La huella negra del 22-J se ha dejado notar en la pretemporada. En el último duelo amistoso de la UD, disputado el pasado martes ante el Estrella en el Estadio Municipal de Maspalomas, el dispositivo de seguridad de la Policía fue reforzado. En el plantel, evocar a la fecha maldita está prohibido. Los jugadores han decidido pasar página y se aferran a la espectacular respuesta de la masa social -que ya acaricia la cifra de los 10.000 abonados-. "Ellos sí representan a este escudo", sentencian desde el vestuario.