Fernando Alonso no correrá en la primera prueba del campeonato del Mundo de Fórmula 1 este año, que se disputará en Melbourne (Australia) el próximo día 15, debido a las recomendaciones médicas tras el accidente sufrido en el circuito de Cataluña el pasado día 22 de febrero.

Los últimos exámenes efectuados al piloto asturiano, dos veces campeón mundial, indican que está en perfectas condiciones, pero se le ha recomendado que es mejor no participar por los peligros que podría acarrear en caso de sufrir una nueva conmoción.

McLaren informaba ayer en un comunicado oficial que Alonso ha comprendido y aceptado la recomendación y que los pilotos de la escudería que competirán en el Gran Premio de Australia serán el británico Jenson Button y el danés Kevin Magnussen.

"Después de haber completado una exhaustiva serie de pruebas y exploraciones -algunos de ellos tan recientes como ayer mismo por la tarde (por el lunes)- los médicos del piloto de McLaren-Honda Fernando Alonso le han informado que lo encuentran asintomático de cualquier problema médico; que no ven ninguna evidencia en absoluto de cualquier daño; y que, por lo tanto, lo consideran completamente sano desde perspectivas neurológicas y cardíacas", señala el texto.

Sin embargo, le han recomendado que tras la conmoción cerebral sufrida "por el momento debe tratar de limitar en la medida de lo posible los factores de riesgo que podrían potencialmente resultar por sufrir otra conmoción tan pronto", apunta el escrito, en el que se precisa que este es un procedimiento médico normal en este tipo de casos.

Por ello, para "limitar los factores de riesgo", los médicos le han aconsejado que no compita en Australia, en la primera prueba del Mundial 2015, y según el comunicado Alonso "ha entendido y aceptado" la recomendación, por lo que tendrá que esperar su reaparición con McLaren en el Mundial de Fórmula 1. Magnussen ocupará su volante junto a Button.

Los médicos saben que el piloto español se siente en forma y bien y que se sentía preparado para competir. De hecho ya ha reanudado los trabajos físicos, que le permitirán estar a punto para el Gran Premio de Malasia, que se disputará el 29 de marzo, en lo que será la segunda prueba del campeonato.

McLaren finaliza el texto mostrando su apoyo a la decisión de Alonso de respetar la recomendación de los médicos.

El pasado viernes, el piloto publicó en su cuenta oficial de Twitter un mensaje dirigido a todos sus seguidores: "Muy pronto nos vemos en la pista".

Quiso devolver las muestras de cariño recibidas durante los tres días que estuvo ingresado en el Hospital General de Cataluña con un mensaje a todos los aficionados en el que señalaba que estaba "perfectamente", pero que los doctores le habían recomendado reposo para no completar las pruebas en el trazado catalán.

El ovetense también expresó ayer en Twitter poco después del comunicado de su escudería que "será difícil no estar en Australia, pero entiendo las recomendaciones. Un segundo impacto en menos de 21 días NO".

Fernando Alonso sufrió un accidente en la salida de la curva tres del circuito de Montmeló al impactar contra el muro a unos 150 kilòmetros a la hora y en el que perdió la consciencia durante algún tiempo, según informó el jefe de la escudería McLaren, Ron Dennis, circunstancia que activó el protocolo de seguridad y tras pasar por la clínica del circuito fue evacuado en helicóptero al Hospital General de Cataluña, donde permaneció tres noches ingresado. En un principio se había asegurado que Alonso estaría ingresado entre 24 y 48 horas, pero finalmente estuvo casi un día más de lo previsto debido a que los galenos querían estar seguros de que el piloto se había recuperado bien del percance en el circuito.

El equipo McLaren-Honda emitió al día siguiente del suceso un comunicado en el que aseguró que "el viento impredecible y racheado" fue el causante del accidente sufrido por Alonso. El piloto regresó a Asturias el miércoles pasado acompañado por sus padres, José Luis Alonso y Ana Díaz, su novia, Lara Alvarez, y su representante, Luis García Abad, donde prosiguió su proceso de descanso.