El ala-pívot español Pau Gasol consiguió su sexto doble-doble consecutivo como director del ataque de los Bulls de Chicago, que vencieron 95-104 a los Sixers de Filadelfia.
Todo lo contrario de lo que le sucedió a su hermano, el pívot Marc Gasol, al ala-pívot Serge Ibaka, y al base Ricky Rubio, que no pudieron evitar las derrotas de los Grizzlies de Memphis, Thunder de Oklahoma City y Timberwolves de Minnesota, respectivamente.
Con su victoria, con la que rompe la racha de tres derrotas seguidas, los Bulls (40-26) se mantienen segundos en la División Central y terceros en la Conferencia Este.
Gasol fue el líder del ataque al conseguir su doble-doble número 45 en lo que va de temporada, con 27 tantos y 16 rebotes.
El español jugó 43 minutos, anotó 13 de 25 tiros de campo, 1 de 2 desde la línea de personal, entregó dos asistencias y puso un tapón.
Derrotas para Marc, Ibaka y Rubio
Marc Gasol llegó al TD Garden, de Boston, y esta vez no pudo ser el líder con su aportación individual que le iba a costar a los Grizzlies de Memphis la derrota por 95-92 ante el equipo local de los Celtics, que luchan por estar en la fase final.
El jugador All-Star disputó 34 minutos en los que anotó 4 de 9 tiros de campo, y 1 de 1 desde la línea de personal, cuatro de los siete rebotes fueron defensivos, pero no tuvo protagonismo dentro de la pintura, y tampoco sus cuatro asistencias, una recuperación de balón y un tapón tuvieron compensación en el marcador final.
Tampoco los 15 que aportó Ibaka, el hispano-congoleño, que jugó con los Thunder de Oklahoma City y su equipo perdió de local por 108-120 ante Los Ángeles Clippers, que les costó bajar al noveno puesto de la Conferencia Oeste.
Ibaka jugó 26 minutos y anotó 6 de 13 tiros de campo, incluido un triple en dos intentos, y estuvo perfecto 2-2 desde la línea de Personal.
Mientras que Rubio tampoco encontró su mejor inspiración en la visita que los Timberwolves hicieron a los Suns de Phoenix, que al final ganaron por 106-97.
El jugador de El Masnou cumplió al aportar ocho puntos, cinco rebotes y seis asistencias, pero no tuvo la brillantez que en partidos anteriores a la hora de la dirección del ataque de los Timberwolves.
Rubio, que disputó 28 minutos, anotó 4 de 11 tiros de campo, falló los cuatro intentos de triple que hizo, tampoco fue a la línea de personal, no recuperó ningún balón y perdió uno.