Los cinco jugadores que ayer comparecieron ante el juez que investiga el supuesto amaño de partidos, de los equipos entonces del Betis, Osasuna y Espanyol, salieron del Palacio de Justicia de Pamplona en calidad de imputados. Son el excapitán de Osasuna, Patxi Puñal; Sergio García, del Espanyol; Jordi Figueras y Jorge Molina, del Betis; y Antonio Amaya, actual jugador del Rayo Vallecano y la pasada temporada del Betis.

Todos ellos comparecieron ante el titular del Juzgado de Instrucción número dos de Pamplona, Fermín Otamendi, que investiga el presunto desvío irregular de 2,4 millones de euros de las cuentas de Osasuna y el supuesto amaño de partidos del equipo navarro en las pasadas temporadas.

La confesión del exgerente de Osasuna Ángel Vizcay ante la Liga de Fútbol Profesional el pasado 26 de enero implica a Puñal y Sergio García en un supuesto amaño del Espanyol-Osasuna de la penúltima jornada de la pasada temporada, así como al exosasunista Damià, esta temporada en el Middlesbrough inglés, quien no compareció ayer. Vizcay implica a Jordi Figueras y Amaya en un presunto amaño de los dos últimos encuentros del Betis la pasada temporada, por primar al conjunto bético para ganar al Valladolid en la penúltima jornada y por dejarse ganar en la última frente a Osasuna en El Sadar.

Tras la imputación de estos cinco futbolistas (Jordi Figueras, Jorge Molina, Antonio Amaya, Sergio García y el ya retirado Patxi Puñal) el número de imputados en la causa asciende a 17 personas, entre ellas el exdirectivo de Osasuna Txuma Peralta, el único en prisión desde el pasado sábado e imputado por hasta cinco delitos, incluido el de amaño de partidos de fútbol.

En un comunicado, Sergio García aseguró que se había acogido a su derecho de no declarar "hasta que se levante el secreto del sumario, ya que desconozco los hechos que se me pudieran imputar y la persona o personas que pudieran haberme acusado de los mismos". El capitán del Espanyol añadió que "quiero dejar claro que una vez se me levante el secreto del sumario, solicitaré voluntariamente declarar en sede judicial sobre los hechos que hasta la fecha únicamente conozco a través de los medios de comunicación".

Mel: "Vienen tranquilos"

El entrenador del Real Betis, Pepe Mel, se mostró muy contrariado por la imputación por presunto amaño de partidos de sus juga-dores Jorge Molina y Jordi Figueras, que declararon ayer en un juzgado de Pamplona, y dijo que "vienen tranquilos" pero que tendrá que "ver mañana -por hoy- cómo están".

Al hilo de este problema, el preparador bético, que atendió a los periodistas tras el entrenamiento en una comparecencia previa al partido que disputarán mañana domingo en Las Palmas de Gran Canaria, reflexionó sobre "ser entrenador", que "no es poner únicamente a once en el campo" sino "estar pendiente de cosas que no son las que deberían importar".

"Yo de leyes no entiendo, no he ido en mi vida a un juicio. Sé de fútbol y poco. Mañana -por hoy- decidiremos si participan en un partido muy importante aunque el equipo está más unido en torno a este problema. Tras el último ascenso, dije que no viviría una temporada tan complicada. Me equivoqué", agregó.

El técnico madrileño advirtió que su obligación es "intentar que no pasen estas cosas".

"El club busca la limpieza, el que haga algo mal lo tiene que pagar. La imagen del Betis tiene que estar inmaculada", concluyó Pepe Mel en su comparecencia.