¿Cómo se explica que, una semana después de caer 0-3 contra el Betis, la UD Las Palmas pierda por 4-2 contra el Numancia en Los Pajaritos?
Se resume claramente en la dinámica por la que estamos pasando. No estamos pasando por un buen momento. El equipo quiere seguir en la misma línea, sigue trabajando toda la semana para sacar los partidos adelante pero parece ser que ahora se nos está volviendo todo en contra. Todos los goles que entraban en la primera vuelta, que a veces entraban solos, ahora nos están costando un mundo. Para nosotros la clave en esta racha es que no conseguimos ver puerta como solíamos y eso, quieras o no, abre los partidos.
Pero el equipo volvió a encajar tres goles en diez minutos, menos de lo que tardó en encajar tres goles la semana pasada contra el Betis.
También es verdad que fueron tres goles muy seguidos que nos matan. Levantar un 3-0 fuera de casa ante el Numancia es muy complicado. El equipo lo ha intentado. En la segunda parte tuvimos incluso el 3-2 para acercarnos y poco después nos hacen el 4-1 y ya así era imposible. Pero esto todavía es muy largo. Un claro ejemplo es el Betis, que nos gana la semana pasada y en esta jornada pinchó. Tenemos que seguir todos unidos, saber cuál es el objetivo final y remar todos a una porque en caso contrario esto no se saca adelante.
¿Considera que el bajón del equipo, sobre todo en los dos últimos partidos, es una cuestión psicológica?
Sí. Quien sepa de fútbol sabe que estas dinámicas pueden ser psicológicas. Esta racha está más en la cabeza de uno que en las piernas. Para ponerle remedio hay que seguir estando juntos, trabajando e ilusionados en que llegue el fin de semana siguiente, ganarle a la Ponferradina y olvidar todo esto.
¿Qué explicación tiene encajar cuatro goles ante un rival que no ha pisado demasiado el área cuando el equipo hasta hace tres semana tenía una defensa de hierro?
Uno intenta buscar explicaciones a esos cuatro goles y no las hay. Por muy bien que trabajes parece que el balón va a caer exactamente en la cabeza del rival y la va a meter. Contra eso lo único que podemos hacer es seguir confiando, seguir peleando y seguir trabajando. Son doce partidos todavía, queda un mundo y esperamos volver a ganar cuanto antes. El equipo necesita una victoria para ahuyentar todos esos fantasmas que tenemos ahora. El sábado en casa el equipo va a mostrar una cara distinta a la de los dos últimos partidos. Estamos confiados en que la afición nos va a respaldar porque necesitamos estar todos juntos para conseguir el objetivo y sacar esto adelante cuanto antes.
¿En qué se parece el equipo al de la primera vuelta, sobre todo al de los meses de noviembre y diciembre?
Sinceramente, las sensaciones que habíamos tenido ante el Sporting y en la primera parte del Betis estaban siendo muy buenas. Se volvía a ver a ese equipo de las primeras jornadas. Fue un palo muy grande para nosotros esa segunda parte contra el Betis. Ha sido también una semana difícil porque hemos perdido el liderato, pero esto es muy largo, quedan doce jornadas y hay que revertir esta situación ya.
¿Cómo se encontraban los jugadores tras la derrota, cómo fueron esos minutos posteriores al final del partido?
Ha habido un mensaje alto y claro: seguimos todos unidos, todos trabajando. Esto al fin y al cabo dentro de dos o tres semanas será una anécdota porque seguiremos peleando en la parte alta de la clasificación, estoy totalmente convencido de ello.
¿Qué dijo el entrenador en el vestuario?
Las palabras del míster después del partido fueron que confía en nosotros, sabe y cree que esto lo vamos a sacar adelante. Él sabe que rachas como ésta las pasa cualquier equipo. Tenemos que seguir todos unidos, seguir trabajando, volver el martes al trabajo con la máxima ilusión y con la vista puesta en la Ponferradina. Va a ser un partido difícil pero estamos confiados de que en casa vamos a conseguir ya esa victoria que tanto necesitamos para cambiar la racha.
¿Cómo se encuentra el equipo físicamente, les está pasando factura la previsión de llegar a las últimas jornadas a tope o ya se sienten al cien por cien?
No, no es eso. El equipo está respondiendo físicamente. Es verdad que si algo caracterizaba a este equipo es que estábamos unidos defensivamente. Terminábamos una jugada y ya había tres tíos de amarillo por detrás del balón. Y también la presión en campo contrario. Nos está faltando un poco eso, son aspectos que tenemos que mejorar porque la calidad en la parte de arriba la tenemos.
¿Por dónde pasa la recuperación del equipo, qué es lo primordial a mejorar?
Si queremos volver a recuperar las sensaciones de la primera vuelta, ese equipo que metía goles en todos los partidos, la clave está en terminar las jugadas, regresar, montarnos atrás con mucho orden y así ser un equipo duro y rocoso. Estamos viendo que cualquier equipo que se te monta detrás del balón con un cierto orden te lo pone muy complicado. Y si nosotros somos capaces de conseguir eso y además, a la hora de recuperar el balón tirar para arriba, tenemos jugadores con calidad de sobra para ganar partidos. La clave está en ser conscientes de que nos tenemos que juntar todos para defender, no podemos defender solamente la línea de cuatro y los tres que están por dentro, tiene que ser un trabajo de los once futbolistas. Esa es la clave que nos va a hacer volver a ser un equipo que meta goles, que apriete y que recupere las señas de identidad de las primeras jornadas.
¿Con Alfredo Ortuño y Sergio Araujo arriba muy juntos y cerca de los centrales, quizás con menos responsabilidad defensiva, les pidió Paco Herrera a los centrocampistas algo diferente?
No, es la misma idea. Si es verdad que cuando el partido se te pone cuesta arriba con ese 3-0 ya no quieres que el balón pase por el centro del campo sino que intentas buscar balones arriba con Alfredo, que hace muy bien el trabajo de espaldas a la portería. Pero la filosofía y la idea es la misma, la de intentar tener el balón y a raíz de ahí crear peligro. En la segunda parte contra el Betis y en Soria no encontramos sensaciones pero no hay que alarmarse, este equipo ha dado motivos para que se confíe y que no sea todo malo. Todos los que siguen a la UD tienen que confiar porque esto se va a sacar.
