Carla Suárez se clasificó ayer para la segunda ronda del Open de China, después de que su rival, la ucraniana Lesia Tsurenko, se retirara por lesión tras el primer set, que la grancanaria había ganado por 6-3.

Tsurenko, la número 35 en la clasificación mundial de la WTA, llegó a romper el segundo servicio de Suárez en los primeros compases del partido, cuando ambas empataban a dos juegos, pero las molestias que la ucraniana comenzó a mostrar a partir de entonces le impidieron terminar el encuentro, disputado en la Pista del Loto del Centro Nacional de Tenis de Pekín.

"He tenido buenas sensaciones en pista, jugando durante la mayor parte del encuentro con tranquilidad y confianza en lo que tenía que hacer", destacó Carla Suárez al término del partido.

"Nunca es agradable avanzar ante una rival que se ve obligada a retirarse, pero desde ahora debo pensar en que tengo otro partido por delante, otra oportunidad para mantener la buena línea" indicó la grancanaria, que con la de ayer suma 37 victorias esta temporada.

La jugadora también subrayó la importancia de tener una buena actuación en el torneo de Pekín, que disputa por séptima vez. "Es el último Premier Mandatory del año", explicó Carla Suárez antes de apuntar que "es el último gran torneo de la temporada regular, y somos conscientes de que hay muchos puntos en juego". "En este torneo todas competimos sabiendo que aquí casi se definirá el ránking de final de temporada, las opciones de Singapur... Hay mucho en juego", puntualizó la grancanaria.