Para la mayoría de los participantes en la Liga de Campeones pasar la fase de grupos es su máximo objetivo. Para los aspirantes al título también es importante hacerlo como líderes. Por eso, uno de los partidos estrella de la cuarta jornada será el Real Madrid-Paris Saint Germain, en el que los dos grandes del grupo A decidirán el primer puesto.

También para mañana se anuncia un partidazo, Sevilla-Manchester City, decisivo para que el equipo andaluz mantenga sus opciones. Atlético de Madrid, Barcelona y Valencia, con más margen de error, se medirán a rivales más asequibles.

En el Parque de los Príncipes apenas aparecieron las estrellas del PSG y del Madrid. Fue una noche para los actores secundarios, como Trapp, Aurier, Marquinhos o Motta, por el lado francés, y Casemiro, Lucas Vázquez y Jesé, por el madridista. Así que mañana algunos llegan con cuentas pendientes, como el argentino Di María, muy criticado tras el primer encuentro con su exequipo. "No voy a salvar al PSG ni ganar la Champions yo solo", se revolvió Di María, que el viernes marcó el gol del triunfo en el campo del Rennes.

"No sé cómo reaccionará la gente ni cómo me tratarán cuando vuelva", señaló ayer Di María en declaraciones recogidas por la agencia Efe. "Todavía llevo en mi corazón todo lo que logré con ese club", añadió en referencia a su etapa en el Real Madrid.

Mientras que el PSG llega casi al completo, con la única duda del defensa brasileño David Luiz, que ya fue baja en la ida, el Real Madrid apura la recuperación de varios titulares.

Para mañana parece segura la vuelta de Keylor Navas a la portería y Sergio Ramos a la defensa. Benítez podrá comprobar hoy la recuperación de otros jugadores que llevan varias semanas sin participar, como Benzema o James Rodríguez. Habrá que comprobar la evolución de otros lesionados, como Carvajal o Bale, así como las molestias que aconsejaron el cambio de Modric al descanso el sábado.

El Sánchez Pizjuán se vestirá de gala para la visita de uno de los grandes de Europa, el Manchester City, ante el que dejó muy buena imagen en el partido del Etihad. Dolió la derrota en el descuento, lo que obliga a los de Unai Emery a mantener la fortaleza en su campo, que se refleja en un dato demoledor: el Sevilla ha ganado los diez últimos partidos de competición europea en el Pizjuán, entre la Liga Europa y la Liga de Campeones.

El Atlético de Madrid, en su visita al Astana, y el Barcelona, que recibe al Bate Borisov, lo tienen todo a favor para consolidar el liderato de sus grupos. Mientras, el Valencia viaja a Bélgica para medirse al Gante, que le planteó muchas dificultades en el choque de ida en Mestalla, resuelto por 2-1. Un empate serviría al equipo del discutido Nuno para seguir a tiro del líder del grupo, el Zenit,y asentarse en el segundo puesto.