La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Deporte base Balonmano

El Gáldar está de vuelta

La base del Grupo Balonmano Gáldar devuelve al municipio parte de su identidad al rescatar el deporte que más internacionalizó a la localidad gracias al desaparecido Cadagua

Benjamín.

Hubo un tiempo donde nombrar Gáldar, irremediablemente, se asociaba a tardes con el público rozando el techo del Juan Vega Mateos. El motivo: el balonmano, que alcanzó su cima en la década de los 90 de mano del Cadagua Gáldar. Tras rozar la gloria con la final de la City Cup en 1995 y asentarse entre la clase media de la ASOBAL, aquel equipo que nació a principios de los 70, se esfumó en 2003 ante la falta de apoyo económico.

Tras algún intento tímido por resurgir de aquellas cenizas en el camino, hoy hablar de Gáldar es volver a hacerlo de balonmano. No hay un equipo que luche por un título europeo, ni siquiera uno senior en divisiones territoriales, pero vive de la ilusión de unos 130 jóvenes que han vuelto a colocar al balonmano y al nombre del municipio de la mano. Hoy el Grupo Balonmano Gáldar es el reflejo de la idiosincrasia de una localidad que vuelve a sentir este deporte.

Fundado en 2008, el club galdense va camino de su octavo año de vida. De la mano de Aday Sánchez, presidente de la entidad, Juan Moreno, directivo del club y el apoyo administrativo de un dirigente histórico del Cadagua, José Luis Domínguez, el regreso del balonmano al municipio es una realidad. "Cuando empezamos con esto no quedaba nada ya de la anterior etapa. Ni equipos, ni entrenadores ni chichos ni chicas que quisieran participar", narra Sánchez desde la sede que el club está montando en el antiguo emplazamiento del Cadagua, rodeado de boletos de rifas y cajas de equipaciones deportivas.

Los inicios de la actual cantera hay que buscarlos en los recreos de los colegios de Gáldar. Sin niños con referencias del deporte optaron por encontrar jugadores potenciales en los descansos entre clase y clase. "En los primeros años, lo que creamos fue un proyecto para dinamizar los recreos. Además, sacamos el balonmano a la calle y montamos pequeñas canchas; promovimos un torneo de 3x3 y otro de Navidad", explica Sánchez. Ahora algunos de aquellos niños que se engancharon al balonmano en los recreos y que disputaron los primeros partidos oficiales del club entran en su última etapa de formación en el equipo juvenil.

En la actualidad el club cuenta con seis equipos federados: un benjamín, un alevín, un infantil, un cadete masculino y otro femenino y un juvenil. Además tiene un proyecto de predeporte con infantes de cuatro, cinco y seis donde desarrollan sus capacidades motrices y disfrutan de la actividad física como complemento educativo. En el horizonte, la creación de un equipo senior la próxima campaña para que los chicos que comenzaron en las canchas de los colegios, hoy casi hombres, puedan seguir jugando juntos.

La ausencia de un referente en Canarias masculino es algo que inquieta a Aday Sánchez, pero que no ha impedido que la entidad haya alcanzado cotas inimaginables hace algunos años. "Sin tener esa referencia en competiciones nacionales o europeas, hemos crecido más que otros clubes. Es más, diría que hoy hay más ilusión en los chicos que en la época del Cadagua", reflexiona. Tanto que esta temporada, por primera vez en la historia del club, cuenta con un equipo de categoría femenina. Algo inimaginable hace unos años y tampoco en aquella época.

Con todo ello, el club trabaja casi como una familia. Ahora mismo el 80% del presupuesto de la entidad se cubre gracias a los pagos de las cuotas de los tutores de los jugadores. "El modelo ha tenido que cambiar. No podemos depender exclusivamente de las subvenciones como pasó en la época de la era dorada del deporte en Gáldar. Eso es inviable hoy", sentencia el entrenador y presidente del club. La implantación de las cuotas provoca a juicio de Aday Sánchez que los padres "estén más implicados" en el día a día del club. Ellos también son una parte importante del club. El resto de ingresos externos del club se completa a base de los pequeños patrocinadores locales que ha captado para la causa (Centro Médico Dental Ayoze Hernández, Neumáticos Vega, Supermercados Atlante, Pinturas Juno y Dulcería-Pastelería Castellano). Un montante que se suele invertir en material deportivo al comienzo de cada temporada o para sufragar costes como los desplazamientos del club alrededor de la Isla, siempre en guagua. Hoy la entidad puede presumir de ser autosuficiente a base de una organización precisa y eficaz.

El legado del balonmano en Gáldar está asegurado. A través de unos carnés individuales donde pueden acumular puntos, los más mayores del club se implican en las actividades y la formación de los más pequeños. "Con ello le ponemos metas a los chicos dependiendo de las tareas que cumplan. Por ejemplo, ayudar a los entrenadores de los más pequeños. Al final, los que más puntos tengan tendrán sus recompensas", sentencia Aday Sánchez. Los resultados sociales están ahí. Pero también los deportivos: catorce jugadores de la entidad estarán en las próximas convocatorias de las selecciones de Canarias.

Compartir el artículo

stats