Este sábado 19 de diciembre, desde las 9 de la mañana, se disputa la segunda edición de la trail Neblina Tres Valles, organizada por el Ayuntamiento de Valleseco con la colaboración del Club Deportivo Neblina Valleseco Trail, que repite el recorrido del pasado año de unos 24 kilómetros. Se completa con la Neblina Stárter, de unos 12 kilómetros, que este año como novedad su ruta coincide con la segunda parte de la trail grande.
En las dos modalidades participan 200 corredores, límite impuesto por la normativa actual sobre medidas medioambientales, por lo que se quedaron fuera muchos interesados. De hecho, las plazas disponibles se cubrieron en sólo 48 horas, pues el atractivo recorrido y la buena organización justifica que muchos repitan en 2015.
La lista de candidatos a las primeras plazas en las dos carreras está muy abierta y pueden haber sorpresas. En la Neblina Tres Valles destacan Evaristo Almeida y Vero Caraballo como favoritos. El pasado año los ganadores fueron precisamente esta última corredora y Samuel Ortega en la clasificación general.
El itinerario parte y llega al centro de Valleseco, para continuar por El Lomo de las Rosas, Zamora, Sobradillo, La Laguna, Zumacal, Monagas, Barranco de la Vírgen, El Molinete, Caserón, Troyanas, Carpinteras, Valsendero, El Prado, Lanzarote, Calderetas y bajada de nuevo por Madrelagua hasta El Recinto en el casco urbano. El pasado año la carrera estuvo marcada por el barro y la lluvia, con pasos de agua en algunos tramos. Nada que ver con el sol que espera este año a los 400 participantes.
Valleseco lleva varios meses preparando con mucho esmero esta prueba -última cita del año en carreras de montaña-, donde primará el trato al corredor, con muchos detalles que irán descubriendo desde la bolsa con el dorsal, los avituallamientos, la entrega de trofeos y la comida al finalizar la prueba.
Además de los valores naturales y paisajísticos del municipio de los tres valles (Madrelagua, Valsendero y Valleseco), será también una oportunidad para conocer muchos productos gastronómicos de la comarca a través de las empresas colaboradoras, la fruta ecológica que se cultiva en el municipio, especialmente la manzana, su respostería dulce y su ya conocida sidra natural.
