El FC Barcelona se ha proclamado este domingo campeón del mundo por tercera vez al superar a River Plate (0-3) en la final del Mundial de Clubes disputada en el International Stadium de Yokohama, donde los blaugranas fueron superiores en todo en el regreso del tridente, con goles de Messi y Suárez por partida doble, y cuajaron un buen partido para hacer historia en la competición ante unos 'Millonarios' que aún así dieron mejor cara que en la semifinal.

Messi, superado el cólico nefrítico, y Neymar, dejada atrás su lesión muscular, fueron titulares junto a un Luis Suárez que había sido el líder en semifinales con su 'hat-trick' ante el Guangzhou. Juntos los tres fueron la punta de lanza de un Barça que fue de menos a más hasta poner el 0-3 en el marcador, con gol de Messi y dos de Suárez y asistencias de Neymar, quien también buscó el gol sin cesar.

No lo encontró, pero sí ganó el Mundial perdido en 2011 ante el Barça, igual que Suárez estrena su palmarés intercontinental mientras que Messi gana su tercer trofeo y, además, marcando en las tres finales. Bien armados en el campo, con superioridad en el centro del campo, ahogaron a River en su camino al tercer entorchado y firmando en el césped la 'a priori' superioridad que hacía que casi todos les dieran por favoritos.

Empezó fuerte y atrevido River Plate, con una cara totalmente distinta a la mediocre mostrada en su anterior partido ante los anfitriones del Sanfrecce Hiroshima, pero el Barça se encargó de frenarles y de poner a los 'Millonarios' en su sitio, aculados y esperando a verlas venir. Poco a poco el Barça dominó, atacó, avisó y sentenció para firmar su tercer Mundial de Clubes y encumbrarse en el palmarés de la competición.

River lo intentó pero, pese a no hacer un mal partido, no pudo. Claudio Bravo, de nuevo titular, no tuvo que lucirse hasta en dos ocasiones pero ya con todo decidido con el 0-3, aunque los argentinos empezaron el partido más intensos y con mucha presencia en el área del guardameta chileno. Todo cambio tras esos 10 minutos iniciales, de la mano de un tridente dispuesto a mostrar su juego en esta final de alcance mundial.

De nuevo, Marcelo Barovero fue el mejor de River pues el guardameta evitó una goleada mayor y mantuvo a los suyos más tiempo en el partido. Encajó el primero, de Messi, pasada la media hora pero estuvo providencial previamente en varios mano a mano con su compatriota, sacando también al '10' blaugrana una falta directa o, ante Luis Suárez al borde del descanso, para evitar ese segundo tanto.

Pero el 0-2 llegó nada más empezar la segunda mitad. Encaró Suárez a Barovero, bien asistido por Busquets, y esta vez no perdonó. Vio la posición del guardameta, esperó a que se desequilibrara y chutó fuerte. Pese a que aguantó bien, el balón se le coló a Barovero entre las piernas y el uruguayo puso el 0-2 en el marcador.

Ahí cambió todo, pues River intentó irse arriba en busca de recortar las diferencias pero no encontró la manera de abrirse espacios entre la defensa blaugrana, bien organizada. Además, el equipo de Luis Enrique seguía teniendo el balón y, sin él, es imposible hacer daño. Era un 'quiero y no puedo' de River, que además propició que fuera dejando cada vez más espacios atrás y dejara vendido a su guardameta.

Y empezó el 'showtime' blaugrana. Con más espacios para crear y correr, Iniesta y Messi empezaron a crear ocasiones, y destacó también esta vez un Neymar que pese a volver de lesión --igual que Messi tras su cólico-- demostró que no solo tiene gol sino que da asistencias. Pero, si algo tiene, es magia. Y la sacó a lucir en una jugada 'a lo Messi' en la que caracoleó y regateó a todo 'Millonario' que le salía al paso, y solo fue detenido antes de poder armar el disparo.

Messi también contribuyó a esos minutos de clara superioridad blaugrana con una jugada marca de la casa en la que Maidana se la sacó casi cayéndose al suelo cuando su remate ya había superado a Barovero. Un mano a mano con Barovero de Suárez lo ganó el portero, y justo después Neymar disparó alto arriba de rosca. River sufría y su sentencia la firmó Suárez. Asistido por Neymar, el uruguayo firmó su segundo gol con un certero remate de cabeza que sentenció el partido y la final.

Cambios sin efectos en River

El técnico de River Plate, Marcelo Gallardo, intentó cambiar el partido al descanso con la entrada del veterano Lucho González y de Gonzalo Martínez por Leo Ponzio y Rodrigo Mora, modificando además sus esquemas, pero el pronto gol de Suárez para poner el 0-2 fue un jarro de agua fría para ellos. Y es que, como en la primera parte, salieron a morder pero poco les duró. Tras el 0-2, los 'Millonarios' se rompieron en dos y empezó el baile blaugrana, más cómodo que nunca el equipo de Luis Enrique, en tromba hacia otro gol y otro Mundial, el tercero.

0 - River Plate: Barovero; Mercado, Maidana, Balanta, Vangioni; Kranevitter; Sánchez, Viudez (Driussi, min.56), Ponzio (Lucho González, descanso); Mora (Martínez, descanso) y Alario.

3 - FC Barcelona: Bravo; Alves, Piqué, Mascherano (Vermaelen, min.81), Alba; Busquets, Rakitic (Sergi Roberto, min.67), Iniesta; Messi, Suárez y Neymar (Mathieu, min.89).

Goles. 0-1, min.36, Messi. 0-2, min.49, Suárez. 0-3, min.68, Suárez.

Árbitro: Alireza Faghani (IRN). Amonestó a Kranevitter (min.10) y Ponzio (min.32) en River Plate y a Alba (min.16), Rakitic (min.43), Neymar (min.61) y Sergi Roberto (min.72) en el FC Barcelona.

Estadio: International Stadium Yokohama (Japón).