El entrenador del Manchester United, Louis van Gaal, arranca 2016 en la cuerda floja: una derrota frente al Swansea podría provocar su despido. El preparador, con el United distanciado de los primeros puestos de la Premier y fuera, prematuramente, de la Liga de Campeones, matizó, sin embargo, que "no hay magia" para cambiar la suerte del club de Manchester.