La estatua erigida en homenaje a Cristiano Ronaldo en su ciudad natal, Funchal (Madeira), fue objeto de un acto vandálico ayer de madrugada y amaneció con el nombre de Messi y el número 10 a la espalda pintados con tinta roja.

Así lo informa este miércoles en portada el periódico deportivo luso "A Bola", que precisa que el monumento fue limpiado pocas horas después por trabajadores de la empresa que trabaja en la construcción de un nuevo museo dedicado al jugador del Real Madrid, y que se ubicará en una zona muy próxima a esta estatua, en la Plaza del Mar.

La pintada se produjo pocas horas después de que el argentino Lionel Messi, futbolista del Barcelona, recibiera su quinto Balón de Oro que le acredita como mejor jugador del 2015 por delante del delantero portugués, que ganó el año pasado este mismo trofeo por tercera vez.

Una de las hermanas de Ronaldo condenó lo ocurrido a través de las redes sociales al calificar el acto vandálico de "vergüenza", además de lamentar la "envidia que existe alrededor" del futbolista.

La estatua, esculpida con 800 kilogramos de bronce y de 3,40 metros de altura, fue inaugurada a finales de diciembre de 2014 y se ha convertido en un atractivo turístico más del archipiélago luso de Madeira.