Durante 28 años, Ángel María Villar ha gobernado el fútbol español con tanta suficiencia que pudo llegar un momento en que se sintió invulnerable. Sólo así se explica que, quizá empujado por el que señalan como su mano derecha, el vicepresidente Juan Padrón, el presidente de la Federación haya concedido créditos al Recreativo de Huelva y el Marino de Tenerife. De esta manera, ambos clubes pudieron pagar deudas con jugadores y entrenadores y les permitió inscibirse en sus competiciones. A diferencia de otras veces, el Consejo Superior de Deportes (CSD) decidió intervenir ante las presuntas irregularidades y ha dado traslado al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) de la documentación relativa a ambos casos. Así que, hoy por hoy, es bastante improbable que Villar pueda presentarse a las elecciones previstas para el 22 de abril.

El CSD dio el jueves un paso decisivo en el 'caso Villar', ya que el TAD podría inhabilitarlo para ocupar cargos federativos. Así se desprende de los términos de la nota pública del Consejo tras enviar los documentos recogidos en la sede de la federación: "Del análisis de dicha información se desprende que la actuación federativa ha podido ocasionar un agravio comparativo y un menoscabo del principio de igualdad de los clubes al adulterar gravemente la competición, lo que pondría en cuestión la imparcialidad de los responsables federativos a la hora de tratar a sus asociados".

Los agravios se refieren a las ayudas federativas al Recreativo de Huelva y al Marino de Tenerife, ambos dirigidos por personas muy cercanas a Villar y Padrón. Según informó El País, el libro mayor de cuenta del Recreativo en la federación registra un ingreso de 216.134,58 euros, que se corresponde con la deuda del club andaluz con el entrenador José Luis Oltra, lo que le hubiese impedido su inscripción en Segunda B, categoría en la que compite actualmente el Decano del fútbol español. Además ese pago, realizado a través de un órgano federativo, el Comité Nacional de Entrenadores (CNE), ha sorteado el embargo de las cuentas del club por Hacienda.

El préstamo fue negociado en la sede de la Federación Española, en Las Rozas, por Pablo Comas, representante de los máximos accionistas del Recreativo, que ofreció como garantía unos pagarés de dudosa solvencia. El Marino de Tenerife también pudo competir en la temporada 2012-13 en Segunda B gracias al préstamo de la federación para saldar una deuda con la plantilla de la temporada 1992-93, sin lo que el club canario no hubiese podido confirmar su ascenso tras varios años en Tercera División.

Ángel María Villar y Juan Padrón se enfrentan a una posible inhabilitación por administración desleal, malversación de fondos y perjuicio a terceros. Se pueden considerar perjudicados los equipos que, cumpliendo todos los requisitos, no pudieron optar a las plazas del Recreativo y el Marino. E incluso los clubes que en su momento fueron privados de la categoría que les correspondía por sus méritos deportivos por impagos a sus plantillas, como fue el caso del Oviedo en 2003, cuando fue condenado a jugar en Tercera División.

El presidente del Consejo Superior de Deportes, Miguel Cardenal, justificó su actuación: "A raíz de unas informaciones muy graves que han salido en los medios, se le han pedido unos documentos y ha dicho que va a hacer alegaciones. Al CSD no le corresponde abrir un expediente, eso es al TAD en el caso de que se produzca esa vicisitud. Las competiciones son oficiales y la federación debe cumplir sus propios reglamentos". Las malas relaciones de Cardenal y Villar son públicas, así como la del presidente federativo y el de la Liga de Fútbol Profesional, Javier Tebas.

Precisamente de la alianza de Cardenal y Tebas ha surgido una candidatura a la presidencia de la federación que le puede poner las cosas difíciles a Villar o, en caso de inhabilitación, a la persona elegida para una línea continuista. La pasada semana confirmó su intención de presentarse a las elecciones Jorge Pérez, secretario general de la Española y que lleva dos años sin ejercer sus funciones por un enfrentamiento con Juan Padrón. Curiosamente otro exsecretario general, Gerardo González, fue el único capaz de poner en apuros a Villar en unas elecciones, ya que en 2004 logró 78 votos, por los 98 con que se impuso el bilbaíno.

Debilidad de la FIFA

Como ahora Pérez, Gerardo González dio el paso adelante de enfrentarse a Villar después de ser destituido unos meses antes. "He visto a dos Villar y el último no me ha gustado nada", dijo en su momento González, tras permanecer once años como su escudero. Palabras muy parecidas a las que pronunció Pérez recientemente para justificar su paso adelante: "El modelo está viejo, hay que renovarlo".

Otro factor en contra de Villar en estos momentos es la debilidad de la FIFA, que pasa por un período de interinidad tras los escándalos que se han llevado por delante a su presiente Joseph Blatter, y casi toda su cúpula directiva. En otras ocasiones, cuando se ha visto en apuros, Villar contó con el apoyo del máximo organismo del fútbol, que amenazó con sanciones a los clubes y a la selección española por lo que consideraba ingerencias del Gobierno. Ángel Villar lo ha vuelto a intentar, pero la determinación de Miguel Cardenal demuestra que algo se mueve en las alturas del fútbol español.