Un autogol de Arribas estira la agonía del Dépor, que encadena once jornadas sin ganar. Esa acción desgraciada selló para el Málaga un punto salvador en el 89 (3-3). En Riazor, en un partido en el que los andaluces aprovecharon tres acciones a balón parado y en el que los deportivistas anotaron el gol 2.000 en Primera, la mala fortuna se cebó con los locales del técnico Víctor.

El Deportivo, que fue dos veces a remolque en el marcador, logró remontar el partido, pero cuando ya empezaba a verse ganador, una falta colgada por Recio la metió en propia puerta Arribas. Charles adelantó al Málaga pero Borges y Camacho hicieron el 1-2. Cartabia y Lucas lograron lo imposible pero los gallegos sufren un mal de ojo.