La Isleta amaneció ayer con la desagradable noticia del fallecimiento de Carlos Marrero Barrios, todo un ícono el fútbol sala canario e incluso nacional. Después de salir airoso de numerosas batallas futbolísticamente, no lo pudo hacer en la madrugada de ayer cuando un tan inesperado como inoportuno infarto le asedió. Esta pérdida ha dejado un hondo pesar y un gran vacío entre la familia del deporte de Gran Canaria, sobre todo del fútbol sala, e incluso entre los vecinos del barrio porteño, en donde era muy apreciado.
Carlos Marrero, hermano del ex jugador de la UD Las Palmas y del Atlético de Madrid, Sergio Marrero, deja un amplio historial deportivo, sobre todo en la modalidad a la que más tiempo dedicó, como es el fútbol sala. Sus momentos más brillantes y exitosos los vivió con el extinto Maspalomas Sol de Europa. Con el conjunto sureño consiguió un campeonato de Liga en la temporada 1993-1994 al superar en la final al Caja Castilla La Mancha. Con Eloy Martín en el banquillo, el conjunto grancanario formó con: Yoyo; Carlos Marrero, Renato, Junior y Martín -cinco inicial- Rufo, Francis y Marcos.
En la campaña siguiente queda subcampeón de Europa con el cuadro de la zona turística otra vez. Cayó en la final ante el Dina de Moscú. En la temporada 1996-1997 consigue un nuevo éxito con el Maspalomas en Murcia, en donde ganó la única Copa para Gran Canaria al vencer en la final al todopoderoso Interviú Lloyds, 2-1. En dicha ocasión, el cuadro grancanario tenía una gran plantilla, compuesta por jugadores grancanarios combinados con brasileños y peninsulares. En esta ocasión, el equipo, dirigido por Padú, estaba conformado por: Yoyo, Cupim, Fran Espinosa, Julio, Martín, Renato, Óscar, Paulinho, Carlos Marrero, Monjonell, Eduardo y Fausto.
Marrero, desde muy joven, recaló en los filiales de la UD Las Palmas. Coincidiendo con el fichaje de su hermano Sergio por el Atlético de Madrid, Carlos ficha en su filial, el Atlético Madrileño. Tras un corto periplo en el club colchonero, vuelve a Gran Canaria y comienza a jugar en el San Antonio. En los torneos que se hacían en honor a las Fiestas del Carmen, en La Isleta, Carlos comienza a destacar en fútbol sala, también en el Ciudad de Las Palmas. Carmelo Álamo, que fue su gran propulsor, consigue conformar una gran plantilla en el inicio del Bazar Sport en la competición de la ACEFS. A este equipo llegó junto a Rufo, Patito y Dani Andueza, entre otros. Posteriormente, Álamo se los llevó a todos al Muebles el Norte. Tras un corto paso por el Gáldar, Carlos Marrero regresa al Sur de la Isla para volver al mismo club, pero con la denominación de Maspalomas Sol de Europa, en donde consiguió sus mayores éxitos. En varias ocasiones y en diferentes épocas, fue llamado por los distintos seleccionadores nacionales, el primero Felipe Ojeda del Rosario, Trona.
Desde aquí nuestro más sincero y sentido pésame a toda su familia: su mujer, Marioli, y sus hijos Evelyn y Yeroem, que juega en el Muelle Grande. Su sepelio tendrá lugar a las 15.30 horas desde el Tanatorio Fucasa de Las Torres.
