El Atlético de Madrid doblegó al Deportivo de La Coruña sin sobresaltos, con goles de Saúl Ñíguez, Antoine Griezmann y Ángel Correa, con un ejercicio práctico, siempre bajo el ritmo que quiso el equipo rojiblanco, y sin un exceso de desgaste antes del definitivo duelo contra el PSV.

Tres puntos más en la Liga para el conjunto madrileño, sin efecto en su persecución del liderato del Barcelona, una semana más a ocho puntos de distancia con un partido menos por disputarse, y un encuentro más sin ganar del conjunto gallego, estancado en una serie de trece jornadas sin victoria y sin ninguna opción en el Calderón.

Porque aunque el Atlético se encontró otra vez de inicio con un rival encerrado, rompió el duelo con pegada y con celeridad ante un oponente frágil. Y es que al cuarto de hora un cabezazo de Saúl Ñíguez a centro de Filipe Luis se cargó el planteamiento de Víctor.

El Deportivo no tuvo presencia en ataque, el Atlético puso el piloto automático y con eso le valió para encontrar el segundo en las botas de un enrachado Griezmann. El francés remató solo y a la media vuelta tras un córner. Correa cerró una goleada plácida.