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Herbalife Gran Canaria Actualidad

La Copa del Rey para en Madrid antes de volver a Gran Canaria

La capital acogerá el torneo en 2017 y la Isla repetirá en 2018

Panorámica del Coliseum durante la última final de la Copa del Rey entre el Granca y el Madrid. LA OPINIÓN DE LA CORUÑA

La Asociación de Clubes de Baloncesto (ACB) empieza a cuadrar las fechas en el calendario para la organización y celebración de las próximas ediciones de la Copa del Rey, un torneo que regresará a Gran Canaria, pero que antes realizará una escala en Madrid: la capital del Reino acogerá la competición en 2017 -el Barclaycard Center será la sede- y un año después, en febrero de 2018, el Gran Canaria Arena tomará el testigo de una cita que hace un mes dejó unos 21 millones de euros en La Coruña.

A falta de concretar los acuerdos entre todas las partes -intervienen, en dos operaciones diferentes, la propia ACB, la Comunidad de Madrid y el Cabildo de Gran Canaria-, la Copa del Rey volvería el próximo curso a la capital tras seis años de escalas en otras ciudades: Barcelona (Palau Sant Jordi, 2012), Vitoria (Fernando Buesa Arena, 2013), Málaga (Martín Carpena, 2014), Las Palmas de Gran Canaria (Gran Canaria Arena, 2015) y La Coruña (Coliseum, 2016).

La Comunidad de Madrid y la ACB han avanzado en las negociaciones después de que la alternativa de llevar el torneo hasta Badalona descarrilara tras el cambio de gobierno en el ayuntamiento de la ciudad catalana en mayo del año pasado. En la patronal del baloncesto español, que ha sido tanteada por localidades como Vitoria, Valencia o Santa Cruz de Tenerife para calibrar sus opciones de acoger la próxima edición de la Copa del Rey, se valora la capacidad del Barclaycard Center (13.045 espectadores) y la buena conexión de la capital con el resto del país.

Esos detalles, en base a los precedentes de otras ediciones que se han disputado en el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid bajo el mismo formato de competición -fase final con ocho equipos participantes-, animan a la ACB a regresar a Madrid, una ciudad que ha acogido el torneo en 2006, 2009 y 2011.

Con Madrid por delante, Gran Canaria ha logrado ultimar los detalles de un contrato con la ACB que van más allá de la organización conjunta de una fase final de la Copa del Rey. La Isla, entre 2017 y 2019, también acogerá una Supercopa Endesa y sentará las bases de un convenio de cooperación con la patronal del baloncesto español en varios sectores estratégicos del deporte: marketing, nuevas tecnologías y proyectos sociales.

Dos citas: 1990 y 2015

Gran Canaria, desde que la ACB asumió la organización de la competición en 1984, ha celebrado dos fases finales de la Copa: en 1990 y 2015. En la primera edición, que se disputó en un Centro Insular de Deportes recién inaugurado -acogió su primer encuentro oficial, un Granca-Mayoral Maristas (actual Unicaja) en 1988-, el CAI Zaragoza se proclamó campeón al superar en la final al Joventut (69-76). Aquel torneo será recordado por la exhibición que firmó el alero estadounidense Mark Davis -alero del CAI- en el partido decisivo ante la Penya: anotó 44 puntos y lideró el triunfo del conjunto maño ante un rival en el que destacaban Jordi Villacampa, los hermanos Jofresa -Rafa y Tomás-, Juan Antonio Morales, José María Margall, Carles Ruf, Reggie Johnson o Lemone Lampley.

En aquel torneo también participaron el FC Barcelona -cayó en cuartos de final ante el Grupo IFA de Chichi Creus-, Real Madrid, Taugrés (Baskonia), DYC Breogán y Valvi Girona.

25 años después, la Copa del Rey regresó a la Isla para celebrar la edición número 79 del torneo en el Gran Canaria Arena. El Real Madrid, con Rudy Fernández y Sergio Rodríguez en plan estelar, levantó el trofeo de campeón al superar en la final al FC Barcelona (71-77). Antes, por el camino, descarrilaron, el Valencia Basket, Bilbao Basket, CAI Zaragoza, Herbalife Gran Canaria -que decepcionó como anfitrión-, FIATC Joventut -verdugo del conjunto claretiano en cuartos de final- y Unicaja Málaga.

Borrar ese mal recuerdo deportivo es uno de los alicientes que mueven al Granca para acoger otra edición de un torneo en que el este año alcanzó la final en La Coruña y que en 2015 dejó un impacto económico de 24 millones de euros en la Isla.

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