La esperanza para el Spar Gran Canaria pasa por los despachos. El club grancanario perdió este fin de semana, tras 33 años en la máxima categoría, su derecho a estar entre los mejores equipos de España del panorama del baloncesto femenino. Ahora, a falta de dos jornadas para el término de la competición y sin nada que hacer para revertir la situación, el comienzo del verano decantará qué pasará la próxima temporada con el club amarillo.
"Seguimos siendo equipo de Liga Femenina hasta el 30 de junio. Ahí la Federación decidirá, como en otros años, quiénes son los que podrán jugar la próxima temporada", explicó Domingo Díaz, presidente y entrenador de la entidad grancanaria en declaraciones a la web del equipo. "Tenemos casi cuatro décadas de historia y estamos saneados. Intentaremos tener todo en regla por si hay plaza en Liga Femenina", aseguró.
Las renuncias de equipos a formar parte de la mejor liga del panorama español ha sido una constante en los últimos años. Este mismo verano, un clásico como el Rivas no pudo hacer frente a las condiciones económicas de la FEB. Campeón de la competición hace dos cursos y finalista de la Euroliga, decidió abandonar la liga. El Ros Casares, campeón del título continental, desapareció con la copa recién puesta en sus vitrinas. El año pasado, el Plenilunio decidió no ascender. Alcobendas o Celta Bosco, lo hicieron años antes.
