El Atlético de Madrid se recompuso a lo grande de la derrota sufrida el pasado martes ante el Barcelona en la Liga de Campeones y también al 1-0 de Diop a la media hora para firmar un triunfo merecido, decantado por la velocidad y pegada de Torres y Griezmann y la inspiración de Koke, que sentenció el pulso.

En cuanto el cuadro rojiblanco remontó, con tantos de El Niño y el francés, el anfitrión ya no supo responder. El Espanyol acabó con todos sus delanteros, pero se quedó sin un triunfo clave para acercarse a la permanencia. La victoria fue para el bloque madrileño, que sí mantiene su escalada hacia el liderato de Liga. El cuadro de Diego Simeone fue superior por juego y empuje. Por creer en sus posibilidades.

Galca presentó un equipo serio, ordenado y sin riesgos. Los de Simeone tenían dificultades para exhibir su calidad y conectar con sus delanteros. Aun así, el cuadro rojiblanco no tardó en explotar la presencia de Torres y Griezmann.

Tras el descanso, los de Simeone tenían el control absoluto del encuentro. Aprovechaban los espacios a la perfección y en más de una ocasión disfrutaron de oportunidades claras.

La postrera derrota del Barcelona en Anoeta, reforzó el triunfo colchonero, pues los de Simeone se encuentran ahora a tres puntos del cuadro blaugrana.