Apenas le quedan un par de metros más al Herbalife Gran Canaria para cerrar el cerco que le ha puesto a su plaza de Playoff por el título de la Liga Endesa. Con 17 victorias y una decena de derrotas en la competición regular, el equipo claretiano tiene cuatro victorias de margen con el octavo -el UCAM Murcia-, último club que tiene ahora el honor de entrar en esas eliminatorias. Acabar cuanto antes esa empalizada es el objetivo que se marcan ahora los obreros de Aíto García Reneses, una empresa que sigue hoy en Zaragoza (11.30, Multi6 -dial 196- Movistar Plus).
El Granca llega al Pabellón Príncipe Felipe con su orgullo herido por todo lo que pasó la semana pasada. Primero, por la cruel eliminación en las semifinales de la Eurocup, donde el equipo amarillo se quedó fuera de rozar una hazaña histórica por una canasta. Sólo un par de puntos robaron al Herbalife el sueño de conseguir su segunda final continental, además de manera consecutiva, tras llegar al partido de vuelta frente al Galatasaray 14 puntos abajo. Segundo, por el tropiezo en casa frente al Valencia Basket, segundo clasificado de la competición, tras maniatarlo durante toda la primera parte del choque.
La nota positiva de la semana pasada fue el regreso de Kyle Kuric. El jugador formado en la Universidad de Lousville volvió a las canchas después de superar un tumor cerebral en sólo cinco meses. Sus números, con nueve puntos basados en un 3 / 4 desde el perímetro, demuestran que su regreso no será testimonial. Con la vuelta de Kuric, a Aíto García Reneses se le abre una nueva desdicha cada fin de semana: tendrá que dejar a un jugador sin vestir.
El descarte
La semana pasada, la cuerda se rompió del lado de Oriol Paulí, que presenció el partido desde la grada. Para el partido de hoy, el técnico madrileño desplazó a todos sus hombres hasta la capital de Aragón. Manejar los minutos de cada jugador y los egos del vestuario es ahora el nuevo reto de Aíto. Hasta seis exteriores tiene en nómina el Granca con Kuric dentro. Al de Evansville se le suman DJ Seeley, Sasu Salin, Oriol Paulí, Brad Newley y Xavi Rabaseda. Dinamita para afrontar el último tramo de la competición.
Si por abajo el Granca tiene un margen de cuatro victorias, por arriba, escalar hasta la cuarta posición parece una quimera. El Laboral Kutxa, que vuela como un cohete hacia la Final Four de la Euroliga, tiene un colchón de dos victorias más el basket average con el Herbalife. No obstante, el exigente partido que tienen hoy contra el Barcelona Lassa y con una posible final de la máxima competición que les haga dosificar fuerzas, son circunstancias que dan algo de fe al Granca para ir a por la cuarta plaza. El Herbalife lleva 20 jornadas consecutivas anclado en el quinto puesto de la tabla.
Frente a todas esas cábalas está el CAI Zaragoza. Lastrados por un inicio pésimo, sus aspiraciones reales están muy lejos de las que se marcaron al inicio del curso. Después de pasar por el Arena y caer en la prórroga por 91-79, el exjugador amarillo y entrenador de los maños, Joaquín Ruiz Lorente fue destituido. Ahora, con tres victorias en los últimos tres partidos en su pista (frente a Movistar, Obradoiro e Iberostar) ha mejorado su futuro.
La planificación de la temporada que hizo el grancanario Willy Villar no salió en el parqué como estaba previsto. Kanacevic y Diener dejaron el equipo hace ya varios meses ya con Andreu Casadevall en el banquillo. El ucraniano Kravtsov, directo del CSKA Moscú, y Jordan Swing han sido sus sustitutos.
Peleando por cerrar cuanto antes la permanencia, el CAI, llamado al principio de la campaña a pelear por cotas mayores, no podrá contar con uno de sus mejores hombres: Joan Sastre. El alero, con un problema en su mano izquierda, es el segundo jugador más valorado de los aragoneses -gracias a sus 11.3 puntos, 3.7 rebotes y 13 de valoración-. Sin embargo, Casadevall recupera a Nate Linhart, otro de sus bastiones en ataque y defensa.
Si hay alguien que ha rendido según marcaban sus expectativas ha sido el exbase del Herbalife Gran Canaria Tomás Bellas. El base madrileño, que fichó por el CAI esta temporada después de seis años en la Isla, ha tirado del carro de los aragoneses. Sus 8.3 puntos, 4.2 rebotes y 9.6 de valoración han sido básicos en las nueve victorias que ha reunido su equipo. Fundamental en la historia reciente del cuadro claretiano, su conexión con Stevan Jelovac defenderá el fortín del Príncipe Felipe ante la llegada del subcampeón de Copa, el CB Gran Canaria.
