Una nueva conexión entre Antoine Griezmann y Fernando Torres, perfectos el francés en el centro y el español en el remate de su noveno gol de la temporada, ha mantenido este miércoles al Atlético de Madrid empatado a puntos con el líder, Barcelona, y con sus opciones intactas en la pelea por el título al imponerse al Athletic Club en San Mamés por 0-1.

Fue una acción aislada dentro de un partido en la línea de los últimos de ambos equipos en San Mámes, con los del Cholo Simeone superando a los de Ernesto Valverde en el marcador tras una infatigable lucha.

El Athletic, que sigue quinto a pesar de la derrota y tiene Europa casi asegurada para la próxima temporada, puso el pundonor y el dominio, pero le faltaron recursos para hacer daño en la casi perfecta defensa colchonera. Si acaso, atemorizó un poco al esloveno Jan Oblak en los centros finales casi a la desesperada con Raúl García continuamente amenazando.

La lesión muscular de Godín que provocó su pronta sustitución, en el minuto 11, y un balón que recogió Iraizoz muy ajustado en la línea del área grande, fue lo más relevante de un arranque con tres llegadas locales. Pero ni Muniain, ni Viguera ni Beñat, este a balón parado, llegaron ni a inquietar a Oblak.

Un cabezazo de Raúl García, a centro de Muniain, que detuvo Oblak fue lo más parecido a una ocasión de gol. Que no llegó a ser.

Pero cuando parecía que llegaba el descanso en medio de la nada, o del orden táctico y las precauciones de ambos equipos, una conexión entre Griezmann y Torres abrió el marcador. El francés puso un centro perfecto y el madrileño un espléndido testarazo que resultó letal para Iraizoz.

Intentó apretar el Athletic al inicio de la segunda mitad y Beñat y Raúl García intentaron buscar las cosquillas a Oblak. Pero el meta esloveno logró detener un fuerte disparo del centrocampista que pareció hacerle un extraño y se mantuvo sereno en un cabezazo hacia atrás de su excompañero que podía complicársele.

Lo pasaron mal los del Cholo Simeone en un arreón bilbaíno con tres córneres seguidos en el minuto 75. Pero ni así llegó a gozar de una ocasión el conjunto rojiblanco, ya con el público volcado. Sí se olió peligro en un par de disparos de Lekue y San José, y en un balón que le cayó a Iñaki Williams a su espalda dentro del área pequeña.

Con el Athletic volcado, Iraizoz salvó a su equipo del 0-2 con un enorme paradón, abajo junto al palo, a disparo de Carrasco tras bajar el balón con el pecho después de un contraataque. Y el internacional belga volvió a perdonar el 0-2 en el minuto 93 disparando alto desde el punto de penalti tras dejar a varios rivales por el suelo.