El Granca no se vende

"Desde luego que el CB Gran Canaria no está en venta de esta manera", expresó ayer Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria. El máximo representante de la institución insular confirmó una reunión con los representantes de Sulaiman Al Fahim, donde éstos le trasladaron su deseo de hacerse con la mayoría del accionariado del club claretiano -en total, del 80% del capital social del Herbalife-. La respuesta del Cabildo, contundente. "Les trasladé en esa reunión que me plantearon en su momento que el CB Gran Canaria no está en venta de esa manera. Les dije que si querían participar que pueden hacerlo como una empresa con el ánimo de aportar en materia de publicidad, capital o dinero para mantener el club", aseguró Morales.

El motivo principal para el presidente del ente grancanario es claro: no colocar en "riesgo" la existencia del Granca. "El valor y el capital social de este club no lo podemos poner en manos de una empresa que en cualquier momento pueda generar incertidumbre sobre la continuidad de este club, eso está por encima de cualquier cosa", explicó Antonio Morales.

Las intenciones que muestra el Grupo Rumancan -sociedad presidida por Samuel Yebra, socio de Sulaiman Al Fahim en Canarias- detrás de este desembolso que estarían dispuestos a ejecutar, es otra gran inquietud para el Cabildo de Gran Canaria. "Nunca lo pondríamos en riesgo y menos convertirlo en un instrumento para una empresa, tiene que ser un instrumento para la sociedad grancanaria", sentenció el presidente insular.

La presión que ejerce la Unión Europea para que las instituciones públicas dejen de sostener a clubes profesionales, algo que, a juicio de Morales, "efectivamente, no tiene por qué ser siempre así", es un tema secundario cuando se puede poner en "riesgo" al propio club. "No creemos que la fórmula de independencia sea poner en manos de una compañía con capital extranjero un valor social para la isla de Gran Canaria", reconoció.

Empresariado canario

La cuestión, bajo el prisma de Morales, cambiaría si esta proposición que ha realizado Al Fahim llegase directo desde las propias Islas. "Si aquí surgiera un empresariado canario, capaz de generar una estructura económica donde pudiéramos participar después, estupendo, lo hablaríamos. Esta fórmula propuesta no es la que consideramos la adecuada", resume.

En su línea se mueve Ángel Víctor Torres, vicepresidente y consejero de Deportes del Cabildo de Gran Canaria. "El CB Gran Canaria es patrimonio de la Isla y de Canarias y no se va a vender", sentenció. Sin embargo, sí que se muestran abiertos a que lleguen "inversores que quieran ayudarnos" con el objetivo de que "el club genere más ingresos externos" y pueda "ir caminando a que tengamos menos ingresos públicos" a la hora de elaborar el presupuesto. Algo que debe sustentarse a su juicio a través de "los éxitos deportivos" que ha conseguido el Herbalife en estos años.

El discurso de Miguelo Betancor, presidente del Herbalife Gran Canaria desde el pasado verano, se mantiene por el mismo sendero: el club no se vende. "Este club no se vende. Otra cosa es que alguien quiera entrar en el club a colaborar. Para eso, todo el que quiera venir tiene la puerta abierta. Vender el club sería entrar en una contradicción, ya que todo el mundo presume de que este club es de toda una Isla", admitió el cargo amarillo.

De nuevo, el trasfondo de una operación como ésta por parte de Sulaiman Al Fahim sale a flote. "La cuestión no es un tema cuantitativo, de decir que pongo un dinero y lo compro. Hay que ver cuáles son las intenciones antes que el dinero, el porqué de la inversion", resume Betancor. Para el exárbitro internacional, el Cabildo "no puede perder una parte importante de este club" porque ha sido "un sacrificio de muchos años" estar al "nivel" que muestra. "A mí no me eligieron como presidente para que esto fuera como una agencia inmobiliaria. No está el cartel de Se vende puesto", afirmó.