La victoria del Herbalife Gran Canaria sobre el Morabanc Andorra y la derrota del Iberostar Tenerife contra el Valencia Basket certificó de manera matemática la presencia del equipo amarillo en el Playoff por el título de la Liga Endesa, una aventura que será la decimortercera en la historia del club claretiano en las eliminatorias finales de la ACB.
La jornada, la número 29, además del éxito del Granca dejó un momento estelar. El asalto del Real Madrid al Palau Blaugrana. Tras su eliminación europea, el equipo de Pablo Laso recuperó ayer en la autoestima con su primer triunfo de la temporada ante el cuadro azulgrana, detalle que conlleva además que el Valencia Basket dependa de sí mismo para acabar líder la fase regular.
Cinco días después de caer eliminado en los cuartos de la Euroliga ante el Fenerbahçe, el Real Madrid se impuso por 86-91 liderado por un imperial Trey Thompkins (25 puntos y 26 de valoración) y un letal Jaycee Carroll, que dieron la vuelta a un partido que el FC Barcelona Lassa tuvo controlado hasta el tercer tiempo.
Los locales no tuvieron suficiente con la mejor versión de Ante Tomic (19 puntos y 31 de valoración) y dejaron escapar una ventaja de 16 puntos en el segundo cuarto ante un rival que fundamentó su triunfo en unos últimos 10 minutos impolutos, en los que completaron un parcial de 15-28.
Esta derrota favorece al Valencia Basket, que sumó una nueva victoria ante un Iberostar Tenerife (93-75), al que dominó desde el inicio, y vuelve a depender de sí mismo para adelantar al conjunto catalán si gana todos los partidos que le quedan.
El domingo dejó la actuación estelar de Darius Adams, base del Laboral Kutxa que anotó 41 puntos en Fuenlabrada.
