De ser uno de los desechos del Real Madrid a convertirse en MVP de la Liga Endesa y uno de los pívots más dominantes en el baloncesto europeo. De salir por la puerta de atrás del banquillo del Valencia Basket a conseguir imprimir su carácter a un equipo que vuelve a oler a grande. Es, de manera simple y gráfica, el resumen de lo que le ha ocurrido este año a los dos hombres vitales esta temporada en Vitoria. El pívot Ioannis Bourousis y el técnico Velimir Perasovic han unido sus destinos en el Baskonia esta temporada para devolver al conjunto vasco sus credenciales históricas y posicionarse de nuevo como uno de los equipos más potentes del baloncesto nacional y continental.
Perasovic en el banda y Bourousis sobre el parqué son los máximos exponentes de este Baskonia, presente en la Final Four de la Euroliga donde forzó al Fenerbahce a tener que jugarse el pase al partido por el título en la prórroga. El pívot heleno ha encontrado en el Buesa Arena el nicho perfecto para demostrar el enorme jugador que llevaba dentro y que no pudo explotar en Madrid, donde pasó las últimas dos campañas. Tanto que al fin de la fase regular de la Liga Endesa se coronó como MVP del curso.
Sus 12.9 puntos de media y 7.09 rebotes por choque le han valido para sumar 18.9 de valoración en los 32 encuentros que ha disputado esta campaña. Pero más allá de sus números, la influencia de Bourousis en el devenir del Laboral Kutxa en cada partido es enorme. Perasovic le entregó el equipo en el 28 x 15 al pívot heleno. Líder en la cancha, funciona casi como la extensión del técnico croata más allá del banquillo. Él es capaz de animar y abroncar a la vez; de generar juego en el poste; de ponerle la mesura al juego del Baskonia cuando se alborota. Todo desde su posición de pívot con un rol que lo hace parecer base desde la pintura.
De ello se aprovechan hombres como Mike James y Darius Adams -máximo anotador y mejor triplista de la campaña regular con 17.2 tantos de media y un promedio de 2.88 tiros de tres por dentro en cada partido-. La pareja junto a Davis Bertans lo bordan desde el perímetro. El poderío defensivo y físico de Adam Hanga ha explotado este año para vertir contrataques de otro nivel. Kim Tillie, Darko Planicic o Tornike Shengelia apuntalan el juego interior. Muchas bazas ofensivas que hacen que su juego disfrute de variantes contínuas. Todo un reto para el Granca.
