José Santana Páez, el primer árbitro canario en debutar en Primera División de fútbol, fallecía en la jornada de ayer después de una larga enfermedad y será incinerado esta misma tarde en el tanatorio de Miller Bajo, a las siete.

Nació José Santana Páez en la capital grancanaria el 11 de agosto de 1930, por lo que estaba próximo a cumplir los 86 años de edad. Desde muy joven se involucró con el fútbol en su barrio de La Isleta, hasta que se decidió por el arbitraje. Era su pasión.

Tal es así que, en una ocasión en la que habló con La Provincia/DLP -justo cuando el fallecimiento de su amigo y también árbitro, que siguió sus pasos, José Merino González-, señalaba que "me gustaba tanto el arbitraje que incluso perdía dinero profesionalmente porque tenía que quedarme en la Península para arbitrar. Iba para dirigir un partido un domingo y tenía que quedarme hasta el siguiente, porque el costo de los colegiados canarios era muy elevado para las arcas de la Federación. Entrenaba con la plantilla del Rayo Vallecano e incluso participaba como jugador en algún que otro partidillo".

Eso sucedía tras debutar en Segunda División en la sexta jornada de la temporada 1964-65 (17-10-1964), en el campo del Mestalla con ocasión del encuentro entre el filial valencianista, Mestalla, y el Constancia de Inca, que finalizó con triunfo de los valencianos (3-1). es temporada dirigió otros seis partidos más.

Al finalizar la temporada 69-70 logró ascender a Primera División, realizando su debut en la categoría en la tercera jornada en el Santiago Bernabéu, con ocasión del Real Madrid-Granada que finalizó con triunfo del equipo que dirigía Miguel Muñoz sobre el de Joseíto por 3-2, con goles de Velázquez (1-0), Lasa (1-1), Amancio (2-1), 'Tigre' Barrios (2-2) y Pirri (3-2), que pondría el resultado definitivo. En ese partido había más canarios sobre el césped: sus jueces de línea, Santiago Morales Romero -en el mundillo futbolístico y en su barrio de San Nicolás conocido como 'El Salvaje'- y Ángel Betancor Montesdeoca; además de los jugadores Antonio Betancort, en el Real Madrid -salió en el minuto 65 sustituyendo al lesionado Borja-, y en el Granada, además del tinerfeño 'Tigre' Barrios estaban el también grancanario Vicente González -que se lesionó en el minuto 40 y fue sustituido por Porta-, y en el banquillo quedó el portero tinerfeño Ñito.

Dirigiría esa temporada otros siete partidos más en Primera División, donde se mantuvo por espacio de dos temporadas más, con un total de 11 y 4 partidos, respectivamente, descendiendole el Comite al término de la campaña 72-73, después de que estuviera tres meses sancionado luego de unos incidentes acaecidos en el partido Deportivo de La Coruña-Málaga en Riazor.

"Se jugaban los minutos finales del partido y Pepe cobró una falta a favor del Málaga, que dirigía Marcel Domingo. Viberti colocó el balón para lanzarla, yo me puse en la línea de fondo y Pepe marcando el fuera de juego. Viberti lanzó y el balón acabó en el fondo de la portería. Inicialmente dio el gol, pero luego se retactó de su decisión y señaló fuera de juego, por lo que el partido acabó 1-0 para los de Arsenio. En esos minutos finales había expulsado a dos jugadores por equipo: Aguilar y Piaza, por el Depor; y Búa y Vilanova, por el Málaga", señalaba a este diario Ángel Betancor, juez de línea con Santana Páez en ese encuentro en tierras gallegas.

"Tras anular el gol, teniendo en cuenta que en aquella época no existía eso de retractarse de una decisión tomada, como existe hoy día, me dijo que debía ser honesto y honrado como siempre había sido en su vida y que había fuera de juego, por lo que debía anular el gol", añadía Betancor.

Posteriormente, al terminó de la temporada 73-74, en la que dirigió 13 partidos, volvió a ascender a Primera División, donde se mantuvo hasta la campaña 1976-77 en la que, con 46 años, se retiró del arbitraje al cumplir con la edad reglamentaria. Su último partido dirigido en Primera División fue en El Helmántico, en una confrontación entre el Salamanca de José Luis García Traid y el Racing de Santander de José María Maguregui, que finalizó con triunfo de los cántabros con gol en propia puerta del argentino Ricardo Rezza. En la filas salmantinas jugaba el tinerfeño Juan Díaz 'Juanito', tras su paso por las filas del Barcelona y el Hércules.

José Santana Páez dirigió un total de 128 partidos en la elite del fútbol nacional -contando los 53 de Primera División y los 75 de Segunda, y sin contar los de Copa-, y fue el que abrió el camino para que, con posterioridad, siguieran sus pasos en la máxima categoría los también colegiados adscritos al colegio de Las Palmas: José Merino González (qepd), Tomás Jiménez Moreno, Fernando Sosa Saavedra, Carmelo Rodríguez Martel, Alexis Pérez Pérez y el actual ábitro internacional y de Primera División, el lanzaroteño Alejandro Hernández Hernández.

José Santana Páez estaba casado con Felisa Pérez Salazar y tuvieron cinco hijos: Mency, Jimmy (qepd), Lucas, Luzma y Betysha. Desde estas líneas les hacemos llegar las más sinceras muestras de condolencia tanto a ellos como al resto de sus familiares.