La selección española solventó el primer amistoso preparatorio para la Eurocopa de Francia con un triunfo sobre Bosnia Herzegovina (3-1) que resolvió al principio el jugador del Celta Nolito, quien dejó dos perlas magníficas propias de un jugador de su calidad.

Así mismo, el choque permitió el ilusionante debut como internacionales absolutos de varios de los meritorios convocados por Vicente del Bosque -hasta ocho- y concedió minutos a otros con los que contará para la defensa de la corona continental.

Nolito sacó de la chistera dos genialidades propias de un futbolista de su calidad, quien se benefició no obstante de la pasividad de la zaga balcánica. En la primera aprovechó un despeje corto de Edin Dzeko para enviar el balón a la escuadra izquierda de la meta de Asmir Begovic, que pese a tocar el esférico no pudo evitar el tanto, y en la segunda, enganchó una vaselina perfecta con la que sorprendió a la zaga y al portero. El andaluz del Celta de Vigo demostró que puede ser un peón de lujo en el torneo continental, un hombre que puede aportar mucho al cuadro de Del Bosque.

Sin embargo, Emir Spahic a la salida de un córner colocó el 2-1, al superar en el salto a Marc Bartra. El exzaguero sevillista Spahic quiso reclamar más protagonismo y se ganó la expulsión con roja directa al borde del descanso tras dar dos manotazos seguidos a Azpilicueta y Fábregas.

El ardor guerrero de Bosnia no le permite rendirse ni con uno menos. Lo demostró en la reanudación, aunque también colaboró en ello el carrusel de cambios que afectó bastante más a España. Sin Silva ni Cesc Fábregas, los de Del Bosque perdieron el control. Los blacánicos rozaron el empate, pero entre Sergio Asenjo, la madera y ciertas dosis de fortuna sus intentonas no fructificaron. Oyarzábal pudo sentenciar el choque a falta de un cuarto de hora, pero fue el tinerfeño Pedro Rodríguez el que tuvo ese honor en el tiempo de descuento para poner el 3-1 definitivo.