Carla Suárez se despidió ayer de Roland Garros, segundo Grand Slam del año, tras perder en los octavos de final ante la kazaja Yulia Putintseva por un doble 7-5.

La jugadora grancanaria no pudo acompañar entre las ocho mejores del torneo a Garbiñe Muguruza, que ayer se coló en semifinales tras superar a Shelby Rogers (7-5 y 6-3), y se quedó sin igualar sus dos mejores participaciones en París, los cuartos de 2008 y 2014.

Suárez se dejó sus opciones por dos inoportunos breaks en los compases finales de cada manga después de un partido de más de dos horas, donde el servicio fue un lastre, cediéndolo en seis ocasiones.

El primer parcial fue una auténtico intercambio de breaks y se registraron hasta siete roturas. Putintseva llevó siempre la iniciativa y tuvo saque con 5-4 a su favor, pero pese a igualar un 0-40 no pudo evitar volver a meter en el partido a Carla. Sin embargo, esta no aprovechó ese refuerzo y entregó por cuarta ocasión su saque en el siguiente juego y la kazaja no perdonó.

Tras otro intercambio de breaks al inicio de la segunda manga, ambas lograron afianzar sus saques y sacar sus juegos adelante hasta que llegaron los momentos claves, que volvieron a jugar en contra de Suárez. Con 5-5, su servicio recuperó su debilidad y Putintseva no lo desaprovechó para lograr la rotura clave que le daría el partido y una cita en cuartos con Serena Williams