Cuando el tercer partido de la serie de cuartos de final de la Liga Endesa frente al Baskonia llegó a su fin, el marcador del Fernando Buesa Arena de Vitoria marcaba un78-71 que significaba el adiós del Granca a la temporada. En el vestuario, el Herbalife intentaba digerir la derrota que ponía el punto final al curso. Ahí, en una esquina, Brad Newley, toalla a la cabeza, era incapaz de contener las lágrimas, de encontrar ningún tipo de consuelo mientras sus compañeros le daban su calor. El motivo no era solo la derrota en sí. Y es que estaba decidido: aquel partido era el último que iba a jugar con la camiseta amarilla del Gran Canaria.
Ayer, el Herbalife oficializó que Brad Newley (1985, Adelaida, Australia) y el club claretiano separan sus caminos después de cuatro temporadas, las más exitosas en cuanto a hitos en la vida de la entidad grancanaria. El alero australiano ha sido parte indispensable del mejor Granca de la historia, con dos subcampeonatos en su haber y las primeras semifinales de Copa y Liga del club amarillo.
Ahora, tras 195 partidos con la camiseta del Granca en los últimos cuatro curso, 4.833 minutos acumulados en total y un casillero particular de1.987 puntos, el internacional aussie abandona el Herbalife. De esta manera, Brad Newley, que acababa contrato con el Granca, regresará a Australia después de una aventura en el baloncesto europeo que comenzó en 2007 en las filas del Panionios griego.
Desde el país oceánico aseguran que Brad Newley cuenta con una oferta multianual del Sidney Kings. "Aún tengo cosas que ofrecer y me gustaría llevar a mi familia a Australia", explicó el jugador en una entrevista difundida por los canales oficiales del club amarillo.
A por sus terceros Juegos
Brad Newley, en Australia desde hace unos cuantos días, se encuentra en la preselección del combinado aussie para acudir a los Juegos Olímpicos de Río 2016. De ir, completaría su tercera participación en una cita olímpica. Un palmarés internacional donde sobresale el Mundial de la categoría júnior conseguido en 2003 en Grecia.
Justo después de los Juegos de Londres 2012, Brad Newley cumplió su primera campaña en el Gran Canaria. Aquel curso, el Herbalife, dirigido por Pedro Martínez, alcanzó sus primeras semifinales de Copa del Rey y de Liga Endesa, en lo que supuso un golpe total a la historia. "Fue increíble. Ahí se unió la Isla y no hemos parado de crecer. Pusimos al Gran Canaria en el mapa y ahora muchos jugadores quieren venir aquí", relata.
En el curso siguiente (2013-2014), Brad Newley dejó un relato para la historia. El 20 de octubre de 2013, a las 9.40 de la mañana, Beth Rosa, la primogénita de la pareja formada por Brad y Brigid, esposa del alero, nació en el Hospital Materno Infantil. En el Centro Insular de Deportes, el Granca se enfrentaba al UCAM Murcia. Con la tele encendida para ver al equipo, la lesión de Ben Hansbrough hizo que Newley, solo unas horas después de ser padre, saliera a jugar la segunda parte del partido. En 12 minutos en pista, el alero se marcó un +29 que provocó la remontada e hizo que el Herabalife ganara el partido.
En los dos últimos cursos, de la mano de Aíto García Reneses ha alcanzado la final de la Eurocup -el curso pasado- y la de Copa del Rey -durante esta campaña-. "Habría estado bien ganar algún título con el Granca, pero creo que siempre cumplimos las expectativas, e incluso las superamos. No dejo nada por hacer aquí, he hecho tantas cosas que es el momento de marcharme", sentencia.
