Sin la oposición de un accidentado Lewis Hamilton, quien abandonó la segunda sesión de entrenamientos libres cuando apenas se habían cumplido quince minutos, el alemán Nico Rosberg exhibió las virtudes de su Mercedes y se erigió en el piloto más rápido de la jornada en Hungaroring.

Tras haber tenido que conformarse con la segunda plaza en la sesión inaugural del Gran Premio de Hungría, el actual líder del Campeonato del Mundo de Fórmula Uno aprovechó la ausencia de su compañero para reivindicar su figura sobre el asfalto.

Con un crono de 1:20.435, el mejor de la segunda sesión y también de la jornada, el piloto de Wiesbaden, de 31 años, celebró su renovación por dos temporadas más -hasta 2018- con las flechas plateadas.