Sergio Rodríguez vivió ayer su primer día en la dinámica de los Philadelphia 76ers. Después de haber conocido las instalaciones de su nuevo equipo, visitó las oficinas y además lució la indumentaria de los Sixers para tomarse las fotografías previas al comienzo de la nueva temporada. Rodríguez asegura que está donde desea. "Este sitio reúne todas las condiciones para haber vuelto a Estados Unidos", significó el base, que ha seguido desde el otro lado del charco la Supercopa ACB, que se saldó con la eliminación en semifinales del Real Madrid.
Entretanto, en la comida anual con los medios de comunicación que celebran los Sixers, el entrenador Brett Brown no quiso dar una cifra de victorias que espera conseguir en su cuarto año al frente del proyecto, y quiso rebajar las esperanzas de algunos periodistas.
Será una temporada "parecida en cuanto a resultados a los tres años que la preceden", dijo. "La única diferencia respecto al año pasado es que todo el mundo dentro de la organización va a querer ganar partidos. Esta temporada es para ver crecer a los jugadores". La pasada campaña los Sixers apenas ganaron 10 partidos de 82 en temporada regular.
