Berdi Pérez, director deportivo del Herbalife Gran Canaria, tiene contrato con el club claretiano hasta el 30 de junio del 2018. Pérez, uno de los principales arquitectos de los éxitos deportivos en los últimos años, firmó con el club claretiano en el 2015, poco antes de las elecciones a la presidencia del Cabildo -administración pública que desde 1992 figura como propietaria de la Sociedad Anónima Deportiva- un contrato de dos temporadas más otra opcional. La condición para activar de manera automática ese tercer curso era la clasificación del equipo para el Playoff en una de las dos temporadas. El equipo amarillo lo consiguió el año pasado, lo que garantiza ya el tercer curso de contrato del director deportivo.
En 1985 aterrizó como jugador al club entonces denominado Claret Las Palmas y lleva 30 años vinculado al Granca -a excepción de las tres temporadas en las que trabajó para Unicaja Málaga y los meses en los que estuvo ligado a la agencia Beo Basket-. Así, Berdi Pérez ha ejercido como jugador, secretario técnico, gerente y director deportivo y, desde los despachos, ha sido una figura clave para entender la progresión del club durante las dos últimas décadas.
En este último verano, sin ir más lejos, la entidad claretiana logró ingresar más de medio millón de euros por Alen Omic y Kevin Pangos, dos fichajes que llevaban un año en el equipo. El esloveno se marchó al Anadolu Efes por unos 400.000 euros y el base canadiense al Zalgiris Kaunas por unos 200.000 al ejercer su cláusula. A cambio llegaron cuatro refuerzos con el base Bo McCalebb, uno de los mejores jugadores de Europa en los últimos años, como estilete. El alero Royce O'Neale y los pívots Richard Hendrix y Darko Planinic fueron los otros tres refuerzos.
De momento este nuevo proyecto ha empezado haciendo historia, tanto positiva como negativa. Y es que el Gran Canaria logró su primer título al levantar la Supercopa Endesa superando a Baskonia y Barcelona, aunque posteriormente ha encajado tres derrotas en las tres primeras jornadas de la Liga Endesa, el peor registro del club en sus años en la ACB.
Sin embargo, el plantel ya demostró en la Supercopa de lo que es capaz y bajo la dirección de Luis Casimiro, otra de las decisiones más delicadas y relevantes de este verano tras la marcha de una leyenda en los banquillos españoles como Aíto García Reneses. Pero la entidad sigue en un buen estado de salud y con Berdi Pérez atado.
